Dylan falleció por un ataque cardíaco luego de ser diagnosticado con un tumor cerebral inoperable. Foto: @WeLovedDylan.
Perder a Dylan fue uno de los momentos más dolorosos en la vida de los ingleses Laura Jacques y Richard Remde. El perro de raza bóxer falleció en junio del año pasado y sus dueños tomaron un camino controversial, usaron los servicios de la empresa coreana Sooam Biotech para clonar al can.
“Tuve a Dylan desde que era un cachorro. Lo cuidé como a un hijo, era mi bebé, mi pequeño, mi mundo”, dijo Jacques en una entrevista con el medio británico The Guardian. El bóxer murió a causa de un ataque cardíaco, luego de ser diagnosticado con un tumor cerebral inoperable. Por esta razón no dudaron en llevar a cabo el proceso.
La clonación de un perro cuesta USD 100 000 y se realiza en Corea del Sur. Sooam ya ha clonado más de 700 canes para clientes de varias partes del mundo. La técnica que utilizan involucra la implantación de ADN en un óvulo al que le han retirado el núcleo. Luego se utilizan impulsos eléctricos para fomentar la división de células y así poder implantarlas en una madre sustituta.
En el caso de Dylan, la pareja tomó las muestras de ADN personalmente y las envió al laboratorio. Si bien en los cinco primeros días tras el fallecimiento las células son más viables, los dueños recolectaron el ADN 12 días después. Aunque el material llegó tarde, luego de un tiempo las células empezaron a crecer.
Luego de implantar las células en la nueva madre esperaron 31 días hasta que pudieron confirmar un embarazo doble. La pareja viajó a Corea para estar presente en el nacimiento de los cachorros.
Actualmente no hay regulaciones internacionales sobre la clonación de mascotas, pero el procedimiento ha levantado controversia por temas éticos en el campo de la medicina veterinaria.
“La clonación de mamíferos no suele ser exitosa. Una de nuestras preocupaciones es que las compañías se aprovechen de los dueños que están sufriendo una pérdida”, explicó Helen Wallace, directora de la organización GeneWatch que vigila las buenas prácticas en el desarrollo de tecnologías relacionadas a la genética. “Creemos que la clonación de mascotas debe ser prohibida. No tiene justificación”, concluyó.
Así mismo la Real Sociedad para la Prevención de Crueldad contra los Animales (RSPCA) también se pronunció de forma negativa. “La clonación de animales requiere procedimientos que causan dolor y molestias con altas tasas de mortalidad”, dijo un representante. Además aseguran que los clones presentan frecuentemente tumores, neumonía y patrones de crecimiento anormales.