En medio de una tormenta, tras 17 kilómetros de ascensión, Richard Carapaz, que disputa su segunda gran vuelta tras su 36º puesto en España en 2017, ganó en solitario al escaparse con autoridad en el último kilómetro. Foto: Agencia AFP
“Esta enorme recompensa en el Giro es increíble”, señaló Richard Carapaz (Movistar), este sábado 12 de mayo de 2018 tras convertirse en el primer ecuatoriano en ganar una etapa en una gran vuelta ciclista al levantar los brazos en solitario en la cima del Santuario de Montevergine di Mercogliano.
“Estoy muy contento, muy emocionado. La verdad es que es una victoria preciosa. Ni yo mismo puedo creer aún haber conseguido esto. Han sido semanas de trabajo muy duro para llegar hasta este Giro”, señaló.
“Ya Asturias -su primer triunfo profesional, a finales de abril- fue bonito, por lograr mi primera victoria en Europa, pero alcanzar esta enorme recompensa aquí en el Giro es increíble”, añadió.
En medio de una tormenta, tras 17 kilómetros de ascensión, Richard Carapaz, que disputa su segunda gran vuelta tras su 36º puesto en España en 2017, ganó en solitario al escaparse con autoridad en el último kilómetro.
“Con la lluvia sabíamos que sería una subida más complicada de lo normal, también muy resbaladiza y con curvas de herradura donde era complicado mantener el equilibrio. Hubo bastantes nervios a pie de puerto pero se hizo una buena selección y pudimos pasar más tranquilos”, analizó el ciclista de 24 años.
“Venía con muy buenas piernas desde pie de puerto y quería probarlo con algo de distancia porque sabía que al esprint no tenía muchas posibilidades. He avisado al coche de que iba a arrancar, he visto que tras un momento de control de Sky saltaba un AG2R y he visto el momento adecuado para probar a falta de 2 km”, continuó.
‘Tenía piernas’
“Una vez que he saltado, veía que tenía piernas para poder sostener ese ritmo hasta meta y todo ha salido realmente bien”, añadió.
Con su triunfo, el ecuatoriano ascendió a la octava posición en la general, a 1 minuto y 6 segundos del líder Simon Yates. Además, consolidó su ‘maglia bianca’ de mejor joven de la carrera. Tras su sorprendente triunfo le preguntaron por sus objetivos en lo que queda de Giro.
“Ir día a día a partir de ahora. Es momento para comenzar a conocer el Giro. Es una carrera realmente larga y dura, y con todo lo que nos queda hasta Roma debemos ir día a día”, dijo.
“Lo que podamos encontrar en el camino, bienvenido sea, y seguramente aún puedan venirnos muchas buenas sorpresas, pero de momento toca disfrutar mucho ese triunfo. Mañana será otra etapa muy dura. Nos toca plantear una nueva estrategia y, quizás, seguir probando”, añadió.
La novena etapa se disputará el domingo y tendrá la meta en el Gran Sasso d’Italia, a 2 135 metros de altitud. La ascensión, de 26,5 kilómetros, es muy complicada en su parte final, cuando se alcanza el Campo Imperatore.