Era miércoles 22 de enero del 2014, trabajadores de AFNA cortaban tubos y mallas en el estadio Olímpico Atahualpa, desde el inicio de aquel año los hinchas ya no tendrían ninguna obstrucción para ver los partidos de fútbol. ‘El Coloso del Batán’, estadio en el que juegan de local Deportivo Quito, Universidad Católica, América de Quito, El Nacional y la Selección ecuatoriana de fútbol fue uno de los pioneros en retirar las mallas para que los aficionados puedan disfrutar del fútbol y son precisamente ellos, los aficionados, quienes aplauden la decisión tomada en 2014.
La dirigencia de Barcelona Sporting Club tomó una decisión fuera de lo común, el equipo ‘torero’ optó por jugar de local en Quito, frente a River Ecuador la noche del pasado 10 de marzo del 2015 la sede para el cotejo fue el estadio Olímpico Atahualpa, ubicado en las avenidas 6 de diciembre y Naciones Unidas, norte de la capital. Hasta ese lugar llegó Carlos Sosa para ver a su equipo, él asiste al estadio siempre que Barcelona juega en la capital. Recuerda que antes – cuando estaban instaladas las mallas – asistir al estadio era “más aburrido”. Además, destaca que la gente ha creado conciencia y se comporta dentro del escenario deportivo.
El Olímpico Atahualpa es un caso especial, por eso fue el primer estadio en el que se retiraron las separaciones metálicas entre la cancha y el graderío. Alrededor de la pista atlética, justo al frente del público existe una fosa que tiene dos metros de ancho y dos de profundidad, este espacio hace que sea difícil el tratar de ingresar al campo de juego. Por esta razón fue el primer estadio en quedarse sin mallas, así lo decidieron hace tres años: José Serrano, exministro del Interior; José Cevallos, exministro del Deporte; Luis Chiriboga, expresidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), Galo Barreto, de AFNA, representantes del Municipio de Quito y Aníbal Fuentes, de la Concentración Deportiva de Pichincha (CDP).
Diego Patricio Díaz siempre asiste al ‘coloso del Batán’, él tiene un puesto de comida rápida dentro del estadio y lleva cerca de 30 años asistiendo al escenario deportivo cuando hay un partido de fútbol. Díaz recuerda que las mallas estorbaban a los aficionados para ver los partidos “se veía todo amontonado”, asegura. Además, este vendedor destaca el tema de seguridad, según su percepción los hinchas han tomado conciencia y se comportan mejor cuando asisten a partidos de fútbol.
A pesar de la opinión de Díaz, sí se han registrado incidentes en el estadio Atahualpa desde que se retiraron las mallas. Uno de ellos sucedió el 2 de septiembre del 2016, en el partido por las Eliminatorias rumbo al Mundial de Rusia 2018, la Selección ecuatoriana enfrentaba a su similar de Brasil, al final del partido un aficionado ingresó al campo de juego para abrazar a la estrella brasileña Neymar. Por esa invasión la Federación Ecuatoriana de Fútbol recibió una multa cercana a USD 7 000.
Desde que se quitaron las cercas metálicas, en el estadio Olímpico Atahualpa se han jugador partidos del Campeonato ecuatoriano de la Serie A y B, las Eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018, un Sudamericano Sub 20, una Copa América Femenina; además de competencias atléticas. Todos estos eventos los aficionados los disfrutaron sin tener una malla que obstaculice su visión.