Familiares de jugadores y directivos del Chapecoense saludan a los aficionados durante una vigilia del martes 29 de noviembre de 2016 en la Arena Condá de Chapecó (Brasil). Foto: Fernando Bizerra Jr./ EFE
Miles de seguidores del equipo de fútbol brasileño Chapecoense se están acercando en forma espontánea al estadio Arena Condá, para homenajear a los miembros de la delegación del club que murieron esta madrugada en un accidente aéreo en Colombia.
Durante todo el día, familiares, amigos y conocidos de las personas fallecidas, tanto como trabajadores del club, yahabían llegado al estadio para esperar juntos noticias relativas a la situación de sus parientes, tras la caída del avión en el que viajaban a Medellín.
También, desde la mañana, grupos de hinchas se agrupaban en las afueras del reducto para brindarse ánimo mutuamente, apoyar a los jugadores del plantel que no habían viajado a Colombia y rezar en forma colectiva. Al final de la tarde, en la iglesia de Chapecó se realizó una misa en homenaje a los muertos.
La asistencia fue multitudinaria, y luego la gente comenzó a marchar hacia el Arena Condá, que tiene una capacidad de 22 600 espectadores. Entonces, la dirigencia del Chapecoense decidió abrir los accesos a las tribunas del estadio, que, sin planificación previa, comenzó a llenarse cada vez más.
Una de las tribunas traseras ya está completamente colmada y hay mucha gente en las laterales. Además, de acuerdo a las informaciones de los medios de Chapecó, la asistencia va todavía en aumento. Según informa el portal ‘Globoesporte’, las personas que llegaron al estadio ya cantaron canciones de aliento para el club y además, gritaron, uno por uno, los nombres de los 22 jugadores que viajaban en el avión y de los cuales 19 fallecieron.
Los momentos más emocionantes se vivieron cuando fueron pronunciados los nombres de Neto, Jackson Follmann y Alan Ruschel, únicos futbolistas sobrevivientes, que se encuentran peleando por su vida, y del arquero Danilo, que fue rescatado con vida de entre los escombros pero luego murió en un hospital.
En el césped del estadio, muchos de los familiares de los jugadores y miembros del cuerpo técnico lloraban de la emoción. El siniestro, que dejó 71 muertos y seis heridos, sucedió este lunes por la noche. El avión, de la compañía boliviana Lamia, había sido contratado por el Chapecoense para desplazar a su plantel deportivo, a hinchas y a periodistas hasta Medellín, donde este miércoles debía jugar ante el Atlético Nacional de Colombia el partido de ida por la final de la Copa Sudamericana, que fue suspendido tras el accidente.