Luis Chicaiza, volante del Delfín de Manta, es admirador de Román Riquelme

Luis Chicaiza, autor de dos goles para Delfín ante El Nacional en el Jocay de Manta el 9 de abril del 2017. Foto: Ariel Ochoa/ API

Luis Chicaiza, autor de dos goles para Delfín ante El Nacional en el Jocay de Manta el 9 de abril del 2017. Foto: Ariel Ochoa/ API

Luis Chicaiza, autor de dos goles para Delfín ante El Nacional en el Jocay de Manta el 9 de abril del 2017. Foto: Ariel Ochoa/ API

Se enamoró del fútbol cuando vio jugar a su padre Luis en el Imbabura, Deportivo Otavalo y Deportivo Quito. Luis Andrés Chicaiza decidió seguir los pasos de su padre y convertirse en futbolista. Nació en Otavalo, tiene 25 años y el Delfín de Manta, su actual club, se convirtió en la mejor vitrina para el hábil mediocampista.

En su infancia, en Otavalo, vio jugar a su padre como volante y eso le inspiró. “Le vi jugar una Copa América de Fútbol Sala en el 2006. Una lesión le complicó y no pudo continuar en el fútbol profesional. Con mi papá siempre iba al fútbol. Empecé en la Selección de Imbabura”, recuerda Chicaiza.

También estuvo en la Sub 16 del Imbabura, pero ante la falta de oportunidades de llegar al equipo estelar de los ‘gardenios’, en el 2010 fue al equipo de sus amores, El Nacional, para jugar en la Reserva.

“Es un muchacho que siempre tuvo esa característica de ser volante creativo. Pega bien los tiros libres y es un enganche con condiciones”, reconoce Sixto Vizuete, técnico que lo dirigió en el Imbabura.

En su ficha consta que pasó por Liga de Quito, el 2014. Jugó 25 partidos y anotó 10 goles. A pesar de la buena campaña no fue ascendido a Primera del equipo albo. El jugador decidió probar suerte en equipos de la Serie B. El 2015 defendió los colores del Olmedo y el año siguiente se enroló al Técnico Universitario de Ambato.

En el ‘Rodillo Rojo’ anotó 14 goles en 36 partidos. Sin embargo, el plantel ambateño no ascendió. El entrenador que le puso el ojo para contratarlo para el Delfín fue Fabián Bustos. Él hizo un seguimiento al desempeño de Chicaiza y recomendó su contratación a Guillermo Sanguinetti.

“A Andrés, a Jacob Murillo y a otros jugadores los vi en la Serie B y eran buenos prospectos. (Chicaiza ) Es un volante con buena técnica y de esos no hay mucho en el fútbol ecuatoriano. Se ha ido adaptando bien al grupo y creo que su contratación la ha respondido con fútbol”, dice Bustos.

Uno de los mejores amigos de Chicaiza dentro del grupo es Jacob Murillo. Ambos fueron compañeros en Olmedo y desde este año comparten las alegrías en Manta. Chicaiza todavía no tiene hijos, pero está feliz porque vive en Manta junto a su novia. Sus padres siempre lo acompañan a los partidos. Algunos familiares también se juntan en los estadios y celebran las jugadas y también los goles del otavaleño.

En lo que va del año ha marcado dos tantos en 11 partidos. Los hizo la tarde del 9 de abril en el estadio Jocay, en la goleada de 3-0 que le propinó el equipo de Sanguinetti al alicaído El Nacional. “Esos goles los celebré con mucha euforia, porque así vivo el fútbol”. Totaliza, además, 318 minutos en el actual Campeonato y ha sido amonestado en dos ocasiones.

Tiene contrato con el club ‘cetáceo’ hasta diciembre de este año, pero con opción de compra. Su empresario es Marcelo Arias. “Es un sueño el momento que estamos pasando en el club. La ilusión es ganar la etapa. Hemos realizado un buen trabajo y ojalá cerremos como punteros”, agrega el futbolista.

Chicaiza también entabló una buena amistad con Roberto ‘La Tuca’ Ordóñez. El atacante siempre le pide que le abastezca de buenos centros. ‘Chica’, como le dice Ordóñez, practica los tiros de esquinas antes y después de los entrenamientos. También ensaya tiros libres al arco desde distintas distancias.

Esa ha sido una de sus costumbres. Trata de imitar la forma de pegarle a la pelota que tenía su ídolo, el mediocampista argentino Juan Román Riquelme. En la Serie B anotó algunos tantos mediante esa vía y su objetivo es llevar al ‘Cetáceo’ a una final en el fútbol ecuatoriano a través de este estilo futbolístico. “Toda mi familia se pone contenta con el momento que tengo en el Delfín”.

Los manabitas defenderán hoy (12:00) en el estadio Bellavista, el primer lugar en la tabla y su invicto de 15 partidos sin perder en el campeonato de este año, precisamente con Chicaiza dentro del campo.

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