Zion Williamson, de los Pelícanos de Nueva Orleans, usa una camiseta de Black Lives Matter cuando es presentado antes del inicio de un juego de baloncesto de la NBA contra los Utah Jazz en HP Field House en ESPN Wide World Of Sports Complejo el 30 de julio de 2020 en Reunion, Florida. AFP
Los jugadores de la NBA acordaron este jueves 27 de agosto del 2020 terminar su boicot de los playoffs en protesta contra el racismo y reanudar los juegos el viernes o el sábado.
A la espera de concretar la fecha de regreso, la NBA suspendió por segunda jornada consecutiva los tres partidos que debían disputarse este jueves y espera “reanudar los juegos el viernes o el sábado”, dijo en un breve comunicado Mike Bass, vicepresidente ejecutivo de la liga.
Los juegos suspendidos el jueves en la sede de Disney World (Orlando) son Utah Jazz-Denver Nuggets (Serie 3-2) y Los Angeles Clippers-Dallas Mavericks (3-2), por la primera ronda de playoffs, y Toronto Raptors-Boston Celtics en su primer duelo por semifinales de la Conferencia Este.
Este jueves se celebraba una conferencia ente representantes de los 13 equipos que compiten por el anillo con miembros de la NBA y el presidente del Comité de Relaciones Laborales, el legendario exjugador Michael Jordan (dueño de los Charlotte Hornets), “para discutir los próximos pasos”, agregó Bass.
En una reunión en Disney World la mañana del jueves, los jugadores habían acordado levantar el boicot que impusieron el miércoles en protesta por el último caso de brutalidad policial contra un hombre afroestadounidense, Jacob Blake.
Frustrados por el escaso impacto que perciben de sus reivindicaciones diarias en Disney World, los jugadores aspiran a que los multimillonarios dueños de las franquicias utilicen su influencia para presionar en busca de cambios legislativos y en los sistemas de justicia y policiales.
LeBron llama a la acción
La rabia y frustración se han expandido desde el lunes en la sede de la NBA por el ataque contra Jacob Blake, quien fue baleado por la espalda por dos policías del estado de Wisconsin (norte) cuando entraba a su camioneta ante la mirada de sus tres hijos.
Los Milwaukee Bucks fueron los primeros en negarse a jugar el miércoles su quinto partido de primera ronda ante los Orlando Magic, lo que precipitó que toda la jornada se suspendiera y los jugadores evaluaran cancelar el resto de la temporada.
El boicot de la NBA fue seguido por equipos de otras competiciones como las Grandes Ligas de béisbol, donde se suspendieron 3 de los 15 partidos del miércoles; la MLS, que aplazó cinco de los seis juegos, y el torneo de tenis de Cincinnati, que pospuso sus semifinales del jueves al viernes.
En una reunión la noche del miércoles, los miembros de Los Angeles Lakers de LeBron James y los Clippers de Kawhi Leonard, dos de los grandes candidatos al título, fueron los únicos en votar a favor de cancelar la temporada.
LeBron, la superestrella de los Lakers, se marchó de la reunión antes del final, según medios de prensa.
En la mañana del jueves “hubo un cambio en la posición de anoche con LeBron James, entre otros, transmitiendo que lo mejor para ellos era terminar la temporada”, dijo Chris Haynes, de Yahoo Sports.
“¡¡El cambio no se produce solamente hablando!! ¡Ocurre con la acción y tiene que suceder AHORA!”, escribió James en Twitter tras la reunión.
Las protestas en la NBA desataron críticas el jueves de Donald Trump, que acusó a la liga de haberse convertido en “una organización política”.
“No sé mucho sobre la protesta de la NBA. Sé que sus índices de audiencia han sido muy malos porque creo que la gente está un poco cansada de la NBA”, dijo el presidente. “Se han convertido en una organización política, y eso no es bueno”.