Para el campeonato 2015, el Ministerio del Deporte entregó USD 309 808. Hubo un reducción de USD 277 000 en relación al presupuesto del 2014. Foto: Archivo / EL COMERCIO
La participación de Ecuador al Mundial de Canadá no mejoró la organización del fútbol nacional femenino en el país. Al contrario, los torneos de las series A y B fueron más cortos que el año pasado porque hubo recortes en su presupuesto.
Para el campeonato nacional de fútbol femenino 2015, el Ministerio del Deporte entregó USD 309 808. Hubo un reducción de USD 277 000 en relación al presupuesto del 2014. La Federación Ecuatoriana de Fútbol, que es el organismo que debe organizar este torneo por recomendación de la FIFA, solamente dio el aval técnico.
El torneo femenino de este año tuvo un número inferior de partidos. En 2014 se realizaron partidos de ida y vuelta con los 12 clubes de la Primera A. Este año se establecieron tres fases, se armaron grupos de cuatro y seis equipos para bajar costos de traslados y arbitraje.
El recorte de presupuesto impidió que se asigne dinero para gastos logísticos, contratación de una ambulancia para partidos y un seguro médico como ocurrió el año pasado.
El torneo de la Serie B fue aún más corto. Se establecieron grupos que se jugaron en fines de semana de feriado.
Por la infraestructura económica que se requiere para organizar los torneos oficiales, las ligas barriales y parroquiales se constituyen en los principales escenarios para que las damas puedan jugar su deporte favorito.
En este ámbito, las jugadoras no son profesionales y su práctica deportiva se queda en el ámbito recreativo.
Los torneos duran entre ocho y nueve meses, lo que no sucede con el campeonato de la FEF.
En Pichincha, la Federación de Ligas Barriales y Parroquiales de Pichincha, Fedebyp, es la encargada de organizar el campeonato provincial con los equipos campeones de las seis matrices: Federación del Cantón Mejía, Asociación de Ligas, Asociación de Microfútbol, Federación de Rumiñahui, Federación de Ligas Barriales de Quito y Unión de Ligas.
Cada matriz realiza torneos previos en los que intervienen, aproximadamente, 4 000 jugadoras. En el torneo de Fedebyp participaron nueve clubes con 180 deportistas. El equipo Los Ángeles, del cantón Mejía, se consagró campeón, mientras que Comité del Pueblo y Rayos se ubicaron en la segunda y tercera posiciones.
El campeón representó a Pichincha en el Campeonato Nacional que se disputó en Napo el 9, 10 y 11 de octubre bajo la organización de la Federación Nacional de Ligas Barriales, Fedenaligas.
El torneo contó con la participación de 350 futbolistas de 19 provincias. Se disputaron 35 partidos y se marcaron 112 goles. La goleadora del certamen fue Tomaza Yugcha, de Imbabura. Chimborazo, Pastaza e Imbabura lograron las primeras posiciones.
Este año, Fedenaligas también organizó el Campeonato Nacional de Fútbol Sala Sub 18, en Guayas. Estuvieron presentes 192 jugadoras de 16 provincias. Chimborazo, Pastaza e Imbabura repitieron en el podio. La mejor jugadora del certamen fue Evelyn Campoverde, de la selección campeona.
La socióloga Karina Burgos, en un estudio realizado sobre el fútbol femenino y publicado en el libro ‘Luchas urbanas alrededor del fútbol’, muestra características particulares de las futbolistas que juegan los torneos barriales: sus edades fluctúan entre los 12 y los 60 años.
La mayor parte de las jugadoras no se ha casado: 52%. Y, con respecto al nivel de educación, el 55% de las jugadoras tiene educación secundaria.