Omar Quintana, exdirectivo de Emelec. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO.
Entrevista a Omar Quintana, nacido en Quito el 22 de marzo de 1943 quien se desempeñó como dirigente de Emelec y Nueve de Octubre. También fue diputado nacional.
¿El fútbol ecuatoriano está en crisis?
No creo que esté en crisis, pero sí tiene problemas bastante profundos. Todavía hay tiempo para rectificar y el Directorio de la Ecuafútbol puede tener una mejor comunicación con dirigentes y demás implicados para remediar lo que está mal.
¿La presidencia de Carlos Villacís es mejor que la anterior?
Yo vi que con Luis Chiriboga había una gran relación con casi todos los actores, pero ahora parece que hay problemas internos en algunos frentes. Solo la gente que está adentro lo sabe, pero es notorio que algo pasa.
¿Conoce de irregularidades?
Directamente no, pero muchos equipos se quejan de la actual dirigencia. Dicen que no son tratados debidamente, escuché que no les han entregado premios a tiempo. Hay cosas que se deben corregir.
¿Cree que Carlos Villacís y su directorio deben continuar en la FEF?
En el momento en que se fue Chiriboga todos debieron renunciar, por dignidad. Ellos sabían lo que pasaba, viajaron a todas partes del mundo con él y la Selección, aprobaron las actas y formaron parte de todas las situaciones que ahora se investigan en la justicia ordinaria.
¿La renuncia de los dirigentes mejoraría la actualidad del fútbol local?
Debieron renunciar, no lo opiné yo, sino todo el país, eso sucedió en toda Sudamérica. Decidieron quedarse para mantener la misma línea de trabajo que tenía Chiriboga, pero no lo han logrado. Estamos lejos de llegar a un Mundial y con problemas administrativos.
Usted habla mucho de Chiriboga, ¿por qué?
El fútbol ecuatoriano tuvo progreso con él, su proceso fue exitoso por los resultados. Es irrefutable. Lo del escándalo es un problema aparte que tendrá que determinar la justicia.
Otro problema es el tema de adulteración de identidades. ¿Empaña la imagen del fútbol local?
Los datos alterados de jugadores no es algo nuevo, en mi época pasó lo de Walter Ayoví y Moisés Cuero. Pensé que era algo que pertenecía al pasado pero no es así. Es difícil identificar estos casos, porque generalmente estos documentos adulterados parecen legales.
Un funcionario público denunció inacción de la FEF en este caso. ¿Lo considera así?
Respeto los criterios de todas las personas, pero deben ser las investigaciones las que den resultados, no yo. Ojalá en esta ocasión sí encuentren a los culpables directos porque es costumbre que nadie sea sancionado.
¿Cómo queda la imagen del fútbol nacional a nivel internacional?
No creo que las repercusiones sean internacionales, más bien es a nivel local. Hay tiempo y espacio para corregir los errores que surgieron en el camino.
Se rumoró sobre sus aspiraciones de llegar a la Presidencia de FEF. ¿Le interesa el cargo?
Hubo equipos que se acercaron a mí para pedirme que sea candidato a presidente de la FEF, pero yo quería esperar los partidos contra Brasil y Perú, por eliminatorias. Si Ecuador ganaba podría ser una posibilidad. Pero ya sabemos lo que sucedió a inicios de este mes.
¿Las derrotas de la Tri lo hicieron declinar?
Cuando pasó, me llamaron unos cuantos equipos para insistir, pero no vi una postura suficientemente sólida y considere incensario estar ahí. Era jugarme mi vida deportiva.
¿Será candidato en posibles elecciones futuras?
Mi ciclo en el fútbol no terminó aún, hice mucho en Emelec y en Nueve de Octubre. Ahora no iba a correr el riesgo de ir a una presidencia sin estar inmiscuido profundamente en el fútbol. Por eso les dije que mejor siguieran su camino, tampoco tengo un óptimo estado de salud.