Bernal, que corrió con el 7359, aparece en la montaña que une a Francia e Italia. Foto: Cortesía Daniel Bernal
El deporte llamó a la puerta de Daniel Bernal por una recomendación médica. Fue hace cinco años, mientras realizaba una maestría en Derecho de la Empresa, en España, cuando recibió la sugerencia por parte de su médico de que realizara algún tipo de deporte para precautelar su salud.
El atletismo fue su aliado, porque le permitía realizar ejercicio sin necesidad de tener que depender de alguien más para practicarlo. Así seguiría las recomendaciones del médico, porque le había subido el ácido úrico en la sangre. Con el tiempo, esta disciplina se convirtió en su ‘hobby’.
En esta primera etapa se entrenaba en el Parque del Retiro, en Madrid, a partir de allí incursionó en carreras de pavimento de 10, 21 y 42 km. Y ahoraparticipa en varias de las pruebas más importantes de trail running a escala mundial.
Su primera Ultra 50K la realizó en España, en el 2014. Al volver al Ecuador no dejó de lado el deporte y continuó con su preparación. Aunque confiesa que prefiere las competencias del exterior, porque le permite conocer otros países; además, que la experiencia es distinta por la forma en la que se organizan estos eventos.
Este año ha participado en dos pruebas: la Petzel 50K, en Baños, en la que se ubicó 38º en la clasificación general, con un tiempo de 10 horas 26 minutos y 7 segundos. Y el 30 de agosto del 2017 compitió en Mont-Blanc, en la TDS 119K. Esta carrera partió desde Courmayeur (Italia) y culminó en Chamonix (Francia). Aquí ocupó la posición 329º en la categoría Senior Hommes y en la general fue 763º. Su tiempo fue de 29:10,24.
Esta última prueba significó una preparación que le tomó 10 meses. En este período hizo entrenamientos con Juan José Calisto, otro de los especialistas en largas distancias. También llevó una dieta especial con la nutricionista Romina Vizuete, que lo ayudó con una alimentación adecuada para el control de su peso.
Otro de los apoyos fue el de su novia, Belén Vicuña, quien es su fisioterapeuta. Ella estuvo al tanto de su preparación y lo acompañó en la competencia.
Su familia ha sido otro de los pilares importantes en este proceso, por toda la motivación. A esto se une el apoyo de empresas que le dieron la mano, como Uribe & Schwarzkopf, donde es uno de sus abogados; otros patrocinadores son Lex Valor, Freshii, Blue Card, Waykana Guayusa, entre otras.
En este exigente recorrido, en diferentes categorías participaron otros ecuatorianos, como Diego Escudero, Christian Marlin, Andrés Villagrán, Paola Uquillas, José Luis Murillo y Gabriela Espinosa.
Ahora su meta es -luego de su período de recuperación- regresar a la actividad física, porque ya está pensando en su próxima carrera. En el 2019 desea correr en el UTMB, también en el Mont-Blanc, pero con un trayecto de 171 km y un desnivel de 10 000 metros.
Daniel, luego de la experiencia con la última carrera, está motivado para su siguiente reto: “Si pude correr 120 km, por qué no voy a poder 170”.
Para esto deberá acumular 15 puntos en tres carreras, que le permitan inscribirse al sorteo para ingresar a esta prueba, en el 2019. Ahora tiene 10 puntos y espera poder competir en una Ultra 100K, para conseguir las unidades restantes.