Los clubes hicieron ajustes de salarios y nóminas

Marvin Corozo (izq.), Lenín Poroso (centro) y Serafín Pandi, durante un entrenamiento del Mushuc Runa, en Ambato. Foto: Glenda Giacometti/ EL COMERCIO

Marvin Corozo (izq.), Lenín Poroso (centro) y Serafín Pandi, durante un entrenamiento del Mushuc Runa, en Ambato. Foto: Glenda Giacometti/ EL COMERCIO

Marvin Corozo (izq.), Lenín Poroso (centro) y Serafín Pandi, durante un entrenamiento del Mushuc Runa, en Ambato. Foto: Glenda Giacometti/ EL COMERCIO

Los directivos de Mu­shuc Runa se reunieron a finales del año pasado y tomaron de­cisiones drásticas: reducir el
presupuesto para el 2016, rebajar el número de la plantilla
y ‘rejuvenecer’ al equipo.

¿La razón? El club perdió ingresos económicos por auspicios y se propuso optimizar recursos para esta temporada. Así lo revela Lorenzo Pichisaca, gerente del plantel, que cumple su tercera temporada consecutiva en la Serie A desde su ascenso.

El año pasado, el conjunto de Tungurahua manejó un presupuesto de 2,5 millones. Para este año se redujo a USD 2,1 millones. “La situación económica del país también se siente en el fútbol. Pero con los recortes evitaremos endeudamientos”, explicó el directivo.

‘El cuadro del Ponchito’ se desprendió de 13 futbolistas del 2015 y fichó a 17. Pero buscó a jugadores más jóvenes. Así, el promedio de edad del conjunto es de 26 años, cuando el año pasado era de 30.

Además, no se renovaron contratos de “sueldos altos”, dice Pichisaca, sin especificar cifras. Así, se marcharon, entre otros, Marwin Pita, Juan Govea y Roberto Ordóñez, quien se vinculó al fútbol mexicano.

Con esto, el salario promedio por jugador, para esta temporada, es de USD 6 000.

En El Nacional, Aucas, Deportivo Cuenca e incluso Barcelona también se realizaron ajustes financieros, sobre todo en los montos salariales.

Los pagos de las mensualidades a los jugadores representan la inversión más alta de los clubes. Entre el 70 y el 80% del presupuesto de los 12 equipos que compiten en la Serie A se destina a este rubro.

Por ello, en El Nacional los dirigentes empezaron a negociar esos montos desde diciembre del 2015. Ellos se reunieron con jugadores y les indicaron que el club apelaría a la austeridad.

“Algunos de ellos comprendieron y es algo muy loable”, explica Tito Manjarrez, presidente del conjunto de los puros criollos.

Manjarrez no detalla los montos salariales del 2016. Pero el año pasado el sueldo más alto era de USD 15 000, para jugadores como Édison Méndez, quien dejó el plantel.

“Para este año tendremos una economía de guerra”, advirtió Manjarrez, debido a que el cuadro arrastra deudas con la Asociación de Futbolistas del Ecuador (AFE) por incumplimiento de pagos.

La austeridad también se impuso en Deportivo Cuenca. “Este año viajaremos cómodamente, pero en bus, a excepción de los juegos en Quito”, explicó Galo Cárdenas, titular del ‘Expreso’. También se buscarán rebajas de precios en los hoteles con el fin de ahorrar lo máximo posible.

Para esta temporada, ningún jugador tiene un salario ­superior a los USD 8 000, in­cluso hay uno con un sueldo
de USD 800. El rol mensual es de USD 105 000.

En ‘El Ídolo’ se redujo en un 80% los gastos por pago de la plantilla, según Alfredo Cuentas, vicepresidente financiero. Él no detallo montos, pero trascendió que el año pasado se invertían USD 600 000 en la plantilla de futbolistas.

Eso sí, explicó que existe una escala salarial, dependiendo del rendimiento. Damián Díaz y Segundo Castillo, como figuras, son los que más dinero reciben, luego vienen los considerados titulares y, después, los suplentes y juveniles.

La situación es diferente en Universidad Católica, River Ecuador e Independiente del Valle. Estos planteles resolvieron mantener sus presupuestos y evitar deudas.

En estos clubes ningún jugador gana más de USD 10 000, según sus directivos.

En River Ecuador contratan a jugadores ‘baratos’ para el mercado nacional. Sus dirigentes realizan convenios con montos discretos, para mantener financiada la plantilla y el personal administrativo.

El sueldo de USD 10 000 lo cobran los jugadores que mejor rendimiento muestran, por goles o cumplimiento de las disposiciones del entrenador.

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