Richard Carapaz junto con directivos de Movistar el 30 de mayo del 2018 en Quito. Foto: David Landeta / EL COMERCIO
Los ojos se le llenaban de lágrimas a Richard Carapaz al ver un video de su participación en el Giro de Italia 2018, luego su mirada se fijaba en el pelotón que lo perseguía aquel 12 de mayo del 2018 y parecía como si se transportara a esa mañana lluviosa cuando terminó en el primer lugar de la octava etapa del Giro. El ciclista carchense llegó a Ecuador este 30 de mayo tras su participación en el Giro, en la que terminó en el cuarto lugar de la clasificación general.
Richard Carapaz arribó al país la tarde de este miércoles y fue recibido por decenas de personas que llegaron al edificio de Movistar, equipo del que forma parte Carapaz, para felicitar al deportista por su histórico cuarto lugar en una de las tres competencias ciclísticas más importantes a escala mundial.
A las 17:30 Carapaz llegó a las instalaciones de Movistar, en el norte de Quito, escoltado por policías. En el ingreso del edificio un grupo de personas de la localidad Julio Andrade, en Carchi, esperaba al ciclista, que nació en sus tierras hace 25 años. Vestido con los colores celeste, azul y blanco del Movistar Team, Richard saludó a los asistentes y a las cámaras.
Ya en la rueda de prensa, el carchense agradeció el apoyo de la gente. Destacó que al salir del país, para participar en el Giro, era solo un ecuatoriano más, pero ahora que regresó encontró un país revolucionado por él.
Carapaz recordó que en algunos momentos de su carrera como ciclista no recibió apoyo, por ello pidió a las autoridades que se gestionen los recursos necesarios para que las siguientes generaciones de ciclistas no vivan lo mismo.
Tras la rueda de prensa, Richard abandonó el edificio de la marca que auspicia a su equipo, entre abrazos, aplausos y cánticos de la gente que no paraba de gritar: “se ve, se siente, Carapaz está presente”.