La parroquia de Tufiño, en Tulcán, en el límite entre Ecuador y Colombia, parecía hoy, 26 de octubre, un poblado abandonado. De las 400 personas, en promedio, que arribaban cada fin de semana, esta vez no sobrepasaron los 20, indico Fidel Paguay, presidente de la Junta Parroquial.
¿La razón? Los últimos sismos de hasta de 5.9 grados en la escala de Richter, que tiene en Alerta Naranja a esta zona del noroccidente del Carchi, en donde sus habitantes se dedican principalmente al cultivo de papa y a la producción de leche.
Según el dirigente, los cientos de visitantes llegan atraídos por las piscinas de aguas termales, la pesca deportiva y la variedad gastronómica.
Agustín Parpuezán, vecino de Tufiño, confirmó que desde el sábado último se reabrió el mercado municipal de la localidad, pero hubo pocos comensales. Quizás por eso solo 5 de las 12 vendedoras decidieron laborar.
La especialidad de este centro de abastos es la trucha frita. También hay caldos de gallina, quesillo con miel de panela, entre otros.
Este sábado y domingo últimos, entre tanto, se registraron cinco movimientos sísmicos con una magnitud entre 3,0 a 4,1 grados. Dos de esos sismos fueron reportados como sentidos hasta las ciudades de Tulcán e Ibarra, está última en la vecina provincia de Imbabura.
Según el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (Ig-epn), estos movimientos de tierra, al igual que los anteriores, están localizados en las inmediaciones de los volcanes Chiles-Cerro Negro, a una profundidad inferior a 10 Km. Es decir, son superficiales.
Por eso, Carlos Paguay, vecino de Tufiño, improvisó una carpa, con plásticos y maderos, para junto a su esposa y tres hijos, pasar la noche en el patio de su vivienda. “A pesar del frío y de la lluvia caída en los últimos días nos quedamos aquí. No queremos arriesgarnos a que nuestra casa se caiga encima de nosotros”. Eso se ha tornado común en la mayoría de familias de esta localidad.
Por eso, Paguay lamenta no recibir aún la ayuda que solicitaron a las autoridades. Se refiere a la entrega de carpas de campaña para enfrentar la emergencia. Esto contrasta, asegura, con lo que ocurre en los Corregimientos de Chiles y Panam, en el lado colombiano. Ahí, el Gobierno de ese país habría entregado unas 3 000 carpas a los habitantes de esas comarcas, para que tomen las precauciones de seguridad.
La circulación por la vía Tufiño-Maldonado, se mantiene restringida desde el jueves último. En ese ramal se produjo la perforación de la calzada a causa de la caída de pesadas rocas del volcán Chiles. De 06:00 a 16:00, vehículos y autobuses de la cooperativa Doramal y Transnorte, que dan servicio a la zona, ingresan o salen de Tufiño a Maldonado.