Etrevista. Ricardo Flores Gallardo. Abogado y articulista del portal Gkill City.
¿Hay suficiente participación de jóvenes candidatos en esta campaña electoral y en el debate político?
Los jóvenes no están teniendo protagonismo. El sistema electoral solo da cabida a que sean los movimientos políticos quienes estén posicionados junto a las personas que ejercen cargos de poder. Veo muy difícil que nuevas personalidades incursionen en el debate y la vida política, cuando hay que ser parte de una estructura.
¿Qué tiene de malo que los jóvenes sean parte de los movimientos políticos?
Los partidos y movimientos son la base de la democracia y es a través de esos mecanismos que deberían posicionarse. Pero su estructura organizativa no lo permite, porque el candidato no es lo importante, sino el respaldo del partido.
Alianza País ha hecho el esfuerzo de posicionar a figuras jóvenes como Viviana Bonilla, actual candidata a la Alcaldía de Guayaquil, o en las elecciones anteriores a Gabriela Rivadeneira.
Sí, pero no ha sido por su mérito propio o por sus propuestas. Sus planteamientos han estado bajo el paraguas de Alianza País y del presidente Rafael Correa. Tanto que en la propaganda electoral del oficialismo el eslogan es que votar por tal o cual candidato es votar por Rafael.
Como guayaquileño, usted ha seguido de cerca la estrategia de campaña de Bonilla. ¿Cómo diferencia la voz propia de una joven candidata con la voz de la dirección nacional?
Ella maneja un discurso firme, propositivo, pero siempre está alrededor de la figura del Presidente. La voz de los jóvenes de Alianza País debería tener más protagonismo.
¿Por qué razón el oficialismo tendría que desarticular el discurso de Correa si le va tan bien en las elecciones?
No se trata de que cambie el discurso de Rafael Correa. El protagonismo debe estar en los candidatos y Bonilla debería ser la imagen más poderosa del movimiento en Guayaquil y no la sombra de Correa.
En Ruptura había figuras jóvenes a las que les fue mal porque ya no estaban bajo el paraguas del Presidente
O sea, entendemos que si Viviana Bonilla no estuviera bajo el paraguas del oficialismo, no sacaría los votos que tiene. Es muy difícil posicionarse.
¿Y Mauricio Rodas, candidato joven a la Alcaldía de Quito, quien ha liderado un movimiento pequeño pero lo ha hecho solo?
Se ha sabido posicionar. Participar en las elecciones presidenciales, con limitaciones evidentes, le sirvió para dar el primer paso y darse a conocer.
Pero Rodas no se identifica como un político de oposición. ¿Esa no es una forma de querer beneficiarse de esa sombra del oficialismo?
Esa es su mayor crítica: definirse como candidato de proposición y la alianza con Antonio Ricaurte confirmó que su estrategia es luchar contra la administración quiteña y no contra Correa, porque sabe que el Presidente tiene aceptación.
¿Esos cálculos no son una forma de repetir lo que hacía la vieja política? ¿Un político joven debe ser franco?
No podemos generalizar. Ni todos los jóvenes son transparentes ni todos los viejos son calculadores. Bonilla apareció en la noche amarilla, en un canal de televisión por fuera de la ley electoral. Esa es una vieja forma de hacer política. Rodas decidió no confrontar con Correa porque a lo mejor es la última manera de conseguir la Alcaldía de Quito. En política hay que ir paso por paso para conseguir resultados.
Hay un grupo de jóvenes en la Asamblea que ha sido criticado por su complacencia frente a las decisiones que toma Carondelet. ¿Es una evaluación adecuada?
En la Asamblea, al existir un movimiento político de mayoría ya no hay debates políticos, solo se vota en bloque. Y las pocas voces críticas han sido saldadas con sanciones. La realidad de la oposición es igual, no hay jóvenes que sobresalgan.
¿En esta campaña se están debatiendo los temas que a los jóvenes les interesan?
En la de Guayaquil no se ve debate de propuestas entre Bonilla y Jaime Nebot. Sus discursos son agresivos.
Si los jóvenes son los que dan vida a una la ciudad, ¿por qué sus necesidades no están en esta campaña?
La forma de hacer política no ha cambiado y lo único diferente es que hay otro partido hegemónico que está en el poder. Pero los debates siguen en el mismo nivel, muy bajos.
¿Qué debe oír un joven de un candidato para llenar sus expectativas?
A los jóvenes nos interesa la cultura, el poder vivir la ciudad, tener una mayor cercanía con la administración municipal. Propuestas académicas yo no encuentro. Y no hay ningún cargo de elección popular más cercano al ciudadano que no sea la Alcaldía y la concejalía.
Hoja de vida
Ricardo Flores Gallardo
Guayaquileño, nació en 1980. Es abogado con una maestría en Derecho Empresarial, en Madrid. Forma parte del grupo de articulistas de distinta profesión y óptica que colabora con el portal Gkill City, de abierta expresión juvenil. Para él, estas elecciones no están conectadas con los jóvenes, ni sus candidatos ni sus propuestas. El sistema político impide la irrupción de nuevas figuras.