Con voz pero sin voto, Marco Murillo y Paco Moncayo se han convertido en dos protagonista de la renovada redacción de la ley de comunicación en la Asamblea.
Los dos legisladores decidieron voluntariamente ayudar a sus colegas de la Comisión de Comunicación para preparar el proyecto. Eso fue parte del compromiso de las fuerzas políticas de la Asamblea para impulsar la ley.
En la sala de sesiones se sientan junto con los representantes de la oposición: César Montúfar, Jimmy Pinoargote, Chyntia Viteri. Pero, sus participaciones no han sido para marcar distancia de los asambleístas de Alianza País, sino para proponer ideas y parámetros para la discusión de los temas.
Por ejemplo, Murillo presentó el viernes un documento sobre la discriminación. Él es presidente de la Comisión de Derechos Colectivos y sostuvo que su equipo ha trabajo sobre el tema no solo de los contenidos de los medios sino que incluya a todos los ámbitos de la comunicación. Estos textos serán analizados en la Comisión legislativa.
Moncayo busca que sus colegas no limiten el debate. Recalca que el debate debe ser amplio “crear una ley de comunicación”, sostiene constantemente el legislador.
Ambos coincidente que la redacción del proyecto de ley de comunicación debe ser amplio y abarcar la mayor cantidad de criterios de grupos sociales.
En la construcción del proyecto aparecieron Rommel Jurado y Omar Barreno, quienes son asesores de la Comisión. Ellos fueron contratados con la intención de entregar insumos y propuestas de artículos a los miembros del grupo legislativo.
Jurado aparece con más experiencia. Él fue parte de Ciespal y del Consejo Consultivo del canal público EcuadorTV. Actualmente, es parte del grupo de investigadores de la Comunicación y es catedrático de la Flacso y de la Universidad Andina. “Nuestro trabajo será apoyar técnicamente a la Comisión para estas dos fases de discusión. La primera sobre la pregunta 9 de la consulta y la segunda abierta a otros temas que están en el proyecto para segundo debate de la Comisión”.
Ellos deberán presentar para el próximo miércoles sus primeras propuestas para el articulado sobre la regulación de los mensajes discriminatorios en los medios.
Libertad de Expresión. Ángel Polibio Chávez/ Jurista
‘Los medios no son la oposición política’
Más que un consejo de comunicación bajo la concepción que se ha planteado creo que debe haber un sistema de autorregulación de los medios. Nadie puede discutir que la calidad de algunos programas o espacios en los medios deja mucho que desear. Pero de allí a que se pretenda ejercer un control, a través de entidades del Estado, hay una gran diferencia.
Es importante que haya un tribunal de honor de los medios, para mejorar la calidad de los mensajes y programación. Ese organismo debería estar conformado por personas que trabajan en periodismo y reúnan condiciones de moral y no reciban órdenes del Gobierno ni de los medios.
La confrontación entre el Presidente y la prensa nace porque el Ejecutivo necesita un medio de confrontación porque él se encargó de destruir a los partidos políticos, que de forma natural hacían oposición.
Entonces creó este fantasma de la prensa corrupta para que el Gobierno pueda tener confrontaciones y de esa forma mantener su agenda.
Los medios no son oposición, lo que hacen es evidenciar lo que pasa en Ecuador. Es equivocado plantear un escenario Gobierno versus Medios. El Gobierno creó esa confrontación porque le interesa, pero la realidad no es esa.
El calificar a la prensa de corrupta es inadmisible. Porque hay personas que merecen respeto y jamás recibirían órdenes del Gobierno ni de los dueños de medios.