El candidato presidencial Lenín Moreno se reunió la noche del 10 de marzo del 2017 con grupos de personas con discapacidad. De esa forma cerró el primer día de campaña de la segunda vuelta en Quito. Foto: Paúl Rivas/ EL COMERCIO
El candidato oficialista Lenín Moreno compartió la noche del 10 de marzo de 2017 con un grupo de personas con discapacidad, en El Calzado, en el sur de Quito. Esta fue su última actividad del primer día de campaña oficial. Estuvo unos 90 minutos con los representantes y miembros de asociaciones de sordos, ciegos, personas con distrofia muscular, otras discapacidades y cuidadores de personas con discapacidad.
Dos de estos representantes aprovecharon el acto para entregarle sus propuestas de trabajo para el próximo periodo de gobierno y ratificar su apoyo. Ana Hurtado, presidenta de la Red de cuidadoras de personas con discapacidades, le entregó un documento con propuestas de políticas públicas en salud, pero no dio detalles al respecto. Aunque sí pidió que se mantenga el programa Joaquin Gallegos Lara.
Silvana Moreno, de una de las agrupaciones de personas con problemas de audición, también le presentó una propuesta. Pidió que se oficialice la lengua de señas como lengua del Ecuador en la Constitución. Y pidió que se mejore la educación bilingüe, es decir que el español escrito y su lengua de señas materna.
Pidió que no se elimine la Senescyt ni la Ley de Comunicación. Que se garantice la estabilidad laboral para las personas con discapacidad y que haya una mayor inclusión y adaptación para esta población en los concursos públicos de méritos. Moreno, por su parte, agradeció a sus simpatizantes y les prometió continuar trabajando por los grupos de atención prioritaria.
Mencionó sus propuestas del programa “Toda una vida”, de la creación de empleo y construcción de viviendas, así como el otorgamiento de créditos para emprendimiento y el bono para los adultos mayores. Moreno además hizo referencia a Iván Espinel, excandidato presidencial de Fuerza Compromiso Social, quién estuvo sentado en medio de los asambleístas electos por Alianza País, que acompañaron a su candidato.
El aspirante a Carondelet dijo que se trata de un joven inteligente, que no ha sucumbido al poder del dinero. Contó que le dio su respaldo político sin pedir nada a cambio, solo que trabaje por los más pobres, y advirtió que ese tipo de ecuatorianos serán los que se requerirán a partir del 24 de mayo.
Moreno también retomó la idea de su esposa Rocío González, de que las mujeres se hagan cargo de la Misión Manuela Espejo, con ella a la cabeza, y la rescaten. Se requieren más “Manuelas” en el país, comentó.