Philippe Michelet (777) en el Campeonato Ecuatoriano de Karting 2019. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Philippe Michelet, de 17 años, heredó el talento en la velocidad de su padre, Jean Pierre, y de su abuelo, Pascal.
En su primera competencia en el campeonato ecuatoriano de karting 2019 (Rotax Max Challenge), sorprendió con sus habilidades a su padre y a los otros competidores, ya que en esta válida alcanzó la ‘pole position’.
De pequeño mostró su interés por el automovilismo; su padre recuerda que solía verlo jugar con carros y que sus conversaciones eran siempre de esta actividad.
La pasión de Philippe por este deporte aumentó cuando vio a su progenitor en la televisión y sus logros alcanzados. Ahora, él quiere proyectarse a través del karting y emular sus logros.
Hace seis años, Philippe tuvo su primera experiencia en una pista; en aquella ocasión Jean Pierre vio un talento en su hijo. Sin embargo, no lo apoyó porque no le agradó la forma de organización de las carreras de aquella época.
Sin embargo, fue hace tres meses cuando Philippe recibió las buenas noticias. Una tarde, Jean Pierre le pidió tener una conversación y Philippe se preocupó, pensó que lo regañarían, pero ese no fue el caso porque finalmente recibió la aprobación de su padre.
“Esto es algo que está en mi sangre, primero fue mi abuelo, luego mi papá y ahora lo hago yo, soy la tercera generación”, dijo orgulloso Philippe.
Él recuerda que fue con su padre a la pista y la recorrieron a pie. Con cada paso que dieron se familiarizó y aprendió las maniobras para cada tramo. Cuando lo hizo en el kart le fue más sencillo.
Actualmente, compite en la categoría Pro Am. Inicialmente debía intervenir en Junior Max, por su edad, pero su contextura física lo pondría en desventaja de los otros pilotos. Él mide 1,85 metros y pesa 180 libras, y para la Junior el peso máximo de los pilotos es de 140 libras. La Pro Am es considerada como la más fuerte de la competencia.
Su padre reconoce que no pensó que Philippe ganaría en su primera vez y que, cuando tomó la decisión de dejarlo competir en el karting, era un momento que ya lo esperaba.
“En algún momento tenía que hacerlo, mi papá lo hizo conmigo y yo tenía que hacerlo con Philippe”, comentó Jean Pierre.
Philippe recibe clases en este deporte de su progenitor y de Patricio ‘Pato’ Larrea, quien fue entrenado por Jean Pierre. Ellos son compañeros de la escudería KTP y rivales de la misma categoría. En este campeonato, Michelet le ganó en dos de tres carreras y la cuarta la empataron.
“Philippe avanza bien y tiene cualidades para esta actividad”, destacó su entrenador.
Ambos registraron 58 segundos y 852 milésimas como su mejor tiempo en la última prueba que disputaron en la pista del Kartódromo Dos Hemisferios. La mejor vuelta de Philippe fue la séptima.
Sus compañeros de pistas también elogian sus cualidades y creen que pronto estará entre los mejores del país.
Para Philippe esta actividad depende de la madurez del piloto. “Hay que tener cabeza para competir y eso destaco en esta categoría”.
Philippe cursa el segundo año de bachillerato en el Colegio Shakespeare, por lo que su tiempo lo organiza en función de sus obligaciones como estudiante y sus entrenamientos. Usualmente pasa en las pistas dos o tres veces por semana, luego de clases.
Él confiesa que no es de los mejores estudiantes de su clase, pero que tampoco se queda en supletorios y que el karting no lo ayudará a tener más concentración en sus actividades cotidianas. Su preparación en el deporte también implica que conozca sobre mecánica, básico en los pilotos de kart. Él quiere incorporar esas aptitudes.
Hasta el momento, en competencia no ha sufrido accidentes, pero sí se ha visto limitado por fallas mecánicas.
En el nacional, Philippe aspira conseguir el título y de esa manera llegar a su primer Mundial de Karting.
Como tercera generación de los Michelet, sintió el peso del apellido en sus hombros, pero con el apoyo de su familia esa preocupación ha ido desapareciendo, ya que finalmente hace lo que le gusta.