La primera ministra británica, Theresa May, y su esposo, Philip, abandonan la sede conservadora en el centro de Londres, Inglaterra, Reino Unido, el 9 de junio de 2017. Los conservadores, liderados por la primera ministra, perdieron la mayoría absoluta, según el recuento oficial de votos de las elecciones generales del jueves en el Reino Unido. EFE
Los conservadores de la primera ministra británica, Theresa May, perdieron la mayoría absoluta en el Parlamento tras las elecciones celebradas el jueves 8 de junio de 2017 en Reino Unido, pues matemáticamente ya no tienen ninguna posibilidad de conseguir la mitad de los 650 asientos de la Cámara Baja.
De esta forma, el Reino Unido se enfrentará a una complicada formación de Gobierno poco antes del inicio de las negociaciones para salir de la Unión Europea (UE), el denominado “Brexit”. Las posibilidades serían la formación de un Gobierno en minoría, uno de coalición o la repetición de elecciones.
Los liberal demócratas, que gobernaron en coalición con los conservadores entre 2010 y 2015, descartaron durante la noche electoral formar una coalición o llegar a un acuerdo. El líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, instó a May a renunciar a su puesto y dar así lugar a un gobierno laborista, antes incluso de que se confirmase la pérdida de la mayoría absoluta conservadora.
Los votantes “han dado la espalda a la política de austeridad” propuesta por la líder conservadora, aseguró Corbyn, cuyo partido podría haber registrado un fuerte avance. May perdió bancas en el Parlamento, votos, apoyo y confianza de la población, dijo Corbyn después de que se confirmara su victoria electoral en la circunscripción Islington North. “Eso es claramente suficiente como para irse y dejar lugar a un gobierno que realmente represente a toda la gente de este país”, sentenció.
Antes de que se confirmase su pérdida de la mayoría absoluta, May había asegurado esta madrugada que permanecerá en el puesto para dar estabilidad al país. “En este momento, más que nada, este país necesita un periodo de estabilidad”, dijo May tras ganar su asiento en el Parlamento por la circunscripción de Maidenhead. “Y si, como han mostrado las indiciaciones resulta que el Partido Conservador ganó la mayoría de los escaños y probablemente la mayoría de los votos, entonces nos corresponderá a nosotros garantizar ese periodo de estabilidad, y eso es exactamente lo que haremos”, afirmó.
May convocó elecciones anticipadas a mediados de abril para lograr más apoyo a su postura negociadora del “Brexit“. Entonces las encuestas le daban 20 puntos de ventaja respecto a Corbyn. Sin embargo, los fallos cometidos durante la campaña y la discusión sobre cuestiones de seguridad tras los recientes ataques terroristas hicieron que su apoyo bajase.