Imagen del epicentro del sismo de 5.3 de magnitud en la escala de Richter al suroeste de Ometepec, en el sureño estado de Guerrero, tomada del portal oficial de la USGS
Un sismo de magnitud 5.3 en la escala de Richter se alcanzó a percibir en Ciudad de México el miércoles 22 de agosto de 2018 y en estados como Oaxaca, Morelos, Puebla y México, sin que hasta ahora se reporten víctimas o daños materiales.
El temblor se produjo a las 18:03 GMT (13:03 hora de Ecuador) con origen 24 kilómetros al suroeste de Ometepec, en el sureño estado de Guerrero, de acuerdo con el Servicio Sismológico Nacional de ese país, que en un reporte inicial había publicado una magnitud de 5.6.
El movimiento no provocó que sonara la alerta sísmica en la capital, la cual se activa a partir de una magnitud de 5.6.
“Sin reportes de incidentes derivado del sismo de magnitud 5.3 con origen en Guerrero. Todos los servicios de la Ciudad de México funcionando en forma normal”, apuntó el coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, a través de Twitter.
Lugo señaló que el sismo “se percibió en algunas zonas” de la capital mexicana, pero el modelo de proyección indicó que “no ameritaba alertamiento para la Ciudad de México”.
En las zonas donde se percibió el movimiento telúrico algunos edificios fueron desalojados conforme a los protocolos de seguridad.
Autoridades de la secretaría de Protección Civil de Guerrero señalaron que fue percibido de “moderado a fuerte” en algunas zonas del estado.
El sismo ocurrió 11 meses después del terremoto del pasado 19 de septiembre, de magnitud 7.1, que dejó 228 víctimas mortales tan solo en la capital mexicana.
El pasado septiembre fallecieron 471 personas en tres sismos -los días 7, 19 y 23-, en la mayor tragedia natural en México desde el terremoto de 1985, que dejó miles de muertos en la capital del país.