Imagen de archivo del 2011 que muestra a miembros de la organización ETA anunciando un alto al fuego. Foto: Archivo AFP
Un juez español decretó este martes 27 de octubre, el procesamiento de cinco antiguos dirigentes de ETA por crímenes de lesa humanidad, a quienes considera máximos responsables de la docena de muertes perpetradas por la organización separatista vasca desde octubre del 2004.
La decisión del magistrado de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, se dirige contra José Antonio Urruticoetxea, alias “Josu Ternera”, exjefe de la organización al frente de ETA durante al menos 15 años (1977-1992).
También están en la lista Garikoitz Aspiazu Rubina, alias Txeroki, Mikel Carrera Sarobe, Ángel Iriondo Yarza y Aitor Elizarán Aguilar, jefes del aparato político y militar de ETA en la última década.
El juez Juan Pablo González decretó fianzas de entre 2 y 7 millones de euros y lanzó una orden de detención internacional contra “Josu Ternera”, en paradero desconocido. El resto se encuentran encarcelados en Francia, donde fueron detenidos en los últimos años.
La causa se inició en julio cuando el juez aceptó a trámite las querellas presentadas por varias asociaciones de víctimas por los atentados cometidos desde el 1 de octubre del 2004, fecha cuando se incluyó el delito de lesa humanidad en el código español.
Desde entonces se le atribuyen doce muertes, entre ellos dos ecuatorianos por una bomba colocada en 2004 en el aeropuerto de Madrid, pero la mayoría de los atentados de ETA en este periodo se saldaron con heridos y daños materiales.
El magistrado centró el caso en la cúpula de la organización al considerar que “tuvieron conocimiento del plan de los delitos cometidos” e impartieron instrucciones. “Nos encontramos ante un supuesto de autoría mediata por dominio de la organización”, añadió aludiendo a la fuerte jerarquía de esta organización que en octubre de 2011 anunció el cese definitivo de la violencia aunque se niega a disolverse y entregar las armas como reclaman España y Francia.
Clasificada como organización “terrorista” por los Estados Unidos y la Unión Europea, ETA es considerada responsable de 829 muertes en 40 años de atentados por la independencia del País Vasco y Navarra, regiones del norte de España.
En julio, el juez estimó que sus acciones podían constituir un delito de lesa humanidad pues forman “parte de un ataque sistemático contra una parte de la población civil, constituidos por colectivos que son perseguidos por razones políticas e ideológicas, cuya eliminación o expulsión (…) son considerados por la organización estratégicamente necesarios para la consecución de sus objetivos políticos”.