Bomberos esperan por el presidente Rafael Correa en la plaza de la Independencia. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO
Cerca de 400 bomberos representantes de todo el país llegaron este lunes 12 de enero del 2015 a la plaza de la Independencia de Quito para hablar con el presidente de la República, Rafael Correa. El objetivo es pedir que no se elimine el sistema de cobro de la tasa de los bomberos, que se hace a través de las planillas del servicio de energía eléctrica.
El jueves 8 de enero del 2015, la Asamblea Nacional ecuatoriana aprobó una reforma que modifica la forma de cobro de esa tasa, que se destina para el funcionamiento de los Cuerpos de Bomberos del país. Ese mecanismo funcionaba a través de las empresas eléctricas, las cuales recaudaban el valor en las planillas eléctricas de cada mes. Ahora, con la reforma se establece que los bomberos firmen convenios por seis meses con las empresas eléctricas para que se efectúe el cobro. Ese plazo se da hasta que los municipios asuman el manejo de las entidades bomberiles.
Sin embargo, hasta este momento, apenas 10 municipios administran los Cuerpos de Bomberos de sus ciudades. En este momento, hay 221 instituciones de bomberos.
Desde antes de las 10:00, una comitiva presidida por el coronel Éber Arroyo, jefe del Cuerpo de Bomberos de Quito, ya ingresó al Palacio Presidencial. Según Arroyo, los representantes de la Presidencia les indicaron que se reunirán con ellos a las 12:00 de hoy.
“Estan esperando hacer un análisis al respecto. El canal de diálogo está abierto”, dijo Arroyo.
Media hora después, los bomberos ingresaban marchando por el lado sur de la calle Venezuela, cerca del Palacio de Carondelet. Asisten representantes de Pelileo, Riobamba, Ibarra, Los Ríos, Manabi…
El cabo Mauricio Loor, del cantón Buena Fe de la provincia de Los Ríos, contó que llegó con sus compañeros como respuesta de una convocatoria. “Estamos peleando por lo que nos favorece a nosotros. Es un gran ingreso que nos están quitando”.
Al momento continúa la ceremonia del cambio de Guardia Presidencial, con la presencia de los bomberos que buscan reunirse con el Primer Mandatario.