Las puertas de las instalaciones de la Unión Nacional de Educadores (UNE), en Ibarra, provincia de Imbabura, en el norte de Ecuador, permanecieron con candando durante la mañana delmartes 30 de agosto de 2016. Seis banderas de color rojo, que identifican al gremio, ondeaban en puertas y en la terraza por los fuerte vientos de verano.
Ningún dirigente o afiliado se encontraba en esta edificación, situada en el norte de la capital imbabureña. En la fachada aún permanece el letrero de las antiguas oficinas del Fondo de Cesantía del Magisterio Ecuatoriano. Junto al inmueble, de dos plantas, en donde funcionan las oficinas de la organización, hay un coliseo para varios usos.
Una mujer que se encarga del cuidado del edificio explicó que los profesores llegaban por la tarde, después de la jornada laboral que cumple en los planteles educativos.
Tras el proceso de disolución que enfrenta el gremio a escala nacional, los dirigentes locales planifican actividades como festivales, foros y carreras atléticas, que se realizarán en la capital imbabureña.
Incluso tienen previsto solicitar a las autoridades del Municipio de Ibarra que estas actividades sean incluidas en el programa de fiestas por 410 años de fundación, explicó Jaime Villacís, presidente de la UNE provincial.
En Imbabura hay 4 651 maestros en el magisterio fiscal, según datos de la Coordinación Zonal de Educación Zona 1. De este número, Villacís asegura que unos 1 400 estarían afiliados a la UNE.