Imagen referencial. Las autoridades de Pichincha, Tungurahua y Cotopaxi están afrontando decesos por encima de los promedios históricos, en el marco de la pandemia. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
El incremento de fallecimientos inusuales continúa en el Ecuador, pero ya no en los niveles que se vivieron, principalmente, en Guayas, Manabí, Santa Elena o Los Ríos, durante abril y mayo pasados.
Durante los primeros 22 días de junio, los datos del Registro Civil todavía evidencian muertes irregulares en Tungurahua y Santo Domingo. Mientras que Pichincha y El Oro muestran un descenso en la mortalidad.
De manera global, EL COMERCIO DATA calculó que desde marzo, que se expandió el coronavirus, hasta el 22 de junio del 2020 se han dado 18 822 fallecimientos inusuales.
Esta cantidad corresponde a la diferencia entre las 43 231 defunciones que se registraron en los tres meses y 22 días analizados y las 24 409 muertes que se dieron entre marzo y junio del 2019.
Guayas, que ha sido considerada el epicentro de la pandemia, tiene la mayor concentración de fallecidos inusuales con un 75%, en el período analizado. Ahí la mortalidad tuvo el pico más alto en abril pasado. En promedio, murieron 392 personas al día, mientras que en ese mismo mes del 2019 fueron 62.
https://public.flourish.studio/visualisation/2938556/
En mayo pasado ya se observó un descenso considerable de 80 decesos diarios frente a los 53 de mayo del 2019; para este mes de junio ya no hay fallecidos inusuales. Aunque a la fecha el número de decesos es alto tomando en cuenta que aún falta una semana para que se termine el mes y los fallecimientos son inscritos con retrasos.
Manabí, Santa Elena, El Oro y Los Ríos, también registraron un incremento significativo de muertes irregulares, pero muy por debajo de las de Guayas. En junio no han superado las cifras de años anteriores, a excepción de El Oro, que aún tiene 87 fallecidos irregulares.
Imagen referencial. Guayas ha sido considerada el epicentro de la pandemia con la mayor concentración de fallecidos inusuales. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Los cantones más afectados en estas provincias han sido Manta, Portoviejo, Santa Elena, Machala, Babahoyo y Quevedo.
En Santo Domingo, en cuya capital se ve mayor movilización de personas e incumplimiento de las reglas de distanciamiento social, afronta fallecimientos sostenidos por encima de lo registrado el 2019, entre abril y junio de este año.
En la Sierra, específicamente, las autoridades de Pichincha, Tungurahua y en menor medida Cotopaxi también están afrontando decesos por encima de los promedios históricos, en el marco de la pandemia, en estos tres meses.
De las provincias amazónicas hay que poner atención en Napo y Sucumbíos que en mayo pasado ya tuvieron cifras irregulares en sus fallecimientos y en junio habría que esperar a los registros tardíos.
Hay que tomar en cuenta que se realiza este cálculo de fallecimientos inusuales, pues el país no cuenta con una estadística concreta de mortalidad, producto del coronavirus.
El Ministerio de Salud Pública (MSP) registra las muertes diarias que han sido confirmadas con una prueba de PCR previa y los fallecimientos probables por los síntomas.
Hasta este martes 23 de junio, en este grupo están 4 274 fallecidos confirmados y 2 875 probables. Ambas cifras no llegan ni a la mitad de las defunciones inusuales que se desprenden de la data del Registro Civil.
https://public.flourish.studio/visualisation/2950336/