En Quito, con carteles y banderas, los diferentes colectivos salieron desde el Parque El Arbolito, en el centro norte de Quito, hasta la Plaza de la Independencia este 28 de julio del 2018. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
Marchas de los grupos denominados en defensa de la vida y la familia recorrieron este sábado 28 de julio del 2018 las calles de ciudades como Quito y Guayaquil por segunda ocasión. Su objetivo fue mostrar su inconformidad ante resoluciones sobre educación sexual, equidad de género y violencia en adolescentes.
En la capital, con carteles y banderas, los diferentes colectivos salieron desde el Parque El Arbolito, en el centro norte de Quito, hasta la Plaza de la Independencia.
Patricia Baquero, representante del grupo Ecuador Busca Líderes, encabezó la marcha con una pancarta en sus manos. Ella explicó que es el comienzo de una serie de acciones encaminadas a “defender a la niñez y adolescencia”.
En el documento de la Corte Constitucional se insiste que la entidad no habló sobre las relaciones sexuales de los chicos. La idea fue ratificar que son sujetos de derechos. En la foto, la marcha en las calles de Quito. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
“Estamos en contra de las decisiones de la Corte Constitucional con respecto a que los adolescentes de 12 a 16 años puedan hacer uso de su vida sexual libremente”.
Días atrás, la Corte Constitucional aclaró que su pronunciamiento se basó en los derechos de educación, sexuales y reproductivos de los adolescentes en el Ecuador que constan en la Carta Magna.
En el documento se insiste que la entidad no habló sobre las relaciones sexuales de los chicos. La idea fue ratificar que son sujetos de derechos. Su aclaración se respalda en instrumentos internacionales, en la Constitución de Ecuador y en la normativa infraconstitucional.
Otra aclaración fue que “en ningún momento la sentencia establece que el Estado tenga derecho sobre los padres”. Los estados son los encargados de adoptar medidas normativas, informativas, de salud, educación y demás para que los adolescentes sepan “los impactos positivos o negativos de sus conductas y determinaciones”.
Pese a ello, en la marcha se repetía que se rechaza una educación sexual para los adolescentes y que los padres son los encargados de educarlos. Además, se pidió la salida de los titulares de los ministerios de Educación, Salud y Justicia.
Juan Andrés Suárez y Michael Llano participaron en la marcha. El primero habló de “mensajes subliminales en la educación a los chicos”. Mientras que el segundo habló que “a los niños no se les puede enseñar educación sexual”. Estos temas deberían ser abordados por los padres, sostuvieron.
En Guayaquil, grupos católicos, evangélicos y adventistas rechazaron con una manifestación masiva este 28 de julio del 2018, el planteamiento de transversalizar el enfoque de género en las mallas curriculares. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
En Guayaquil se vivió una jornada similar. Con cánticos religiosos y carteles con versículos bíblicos, cientos de personas marcharon por las calles de la ciudad.
Grupos católicos, evangélicos y adventistas rechazaron con una manifestación masiva el planteamiento de transversalizar el enfoque de género en las mallas curriculares.
El tema generó debate desde la publicación del Decreto Ejecutivo 397, que luego fue cambiado por el 460. Ambos se enmarcan en la Ley Orgánica Integral para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres.
El primero incluía términos como nuevas masculinidades, mujeres en su diversidad, cambio de roles y eliminación de estereotipos de género. El segundo los sintetizó en la igualdad entre hombres y mujeres, los valores asociados a un comportamiento libre de machismo y el desarrollo de conductas no discriminatorias.
“Son términos muy ambiguos, muy abiertos -dijo Enma Cordero-. Yo no quiero un Estado salvador; a mis hijos los educo yo, en mi libertad, en mis creencias”. Ella acudió a la marcha con sus dos hijas. Al igual que las otras familias que se sumaron, todos vistieron de blanco.
El tema generó debate desde la publicación del Decreto Ejecutivo 397, que luego fue cambiado por el 460. Ambos se enmarcan en la Ley Orgánica Integral para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres. En la foto, la movilización en Guayaquil. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
La consigna de la convocatoria fue ‘con mis hijos no te metas’, frase con la que han generado debate en las redes sociales en las últimas semanas.
El pasado jueves, un grupo de líderes religiosos se reunió con el ministro de Educación, Fander Falconí, para analizar el tema. El funcionario aclaró que no hay modificaciones en los textos escolares y que se harán los cambios pertinentes a través del diálogo con la comunidad educativa.
Gabriel Aguirre marchó esta mañana con una Biblia en su mano izquierda y un cartel en la derecha. “Dios estableció una familia original: padre, madre e hijos. Todo el que se esté desviando del plan original de Dios tiene que ser ayudado”, comentó.
Activistas de Derechos Humanos y de grupos Glbti (gays, lesbianas, bisexuales, transexuales e intersexuales) han referido en foros que el Decreto 460 busca reducir la violencia contra las mujeres, a través de una revisión de los roles social e históricamente impuestos.
La movilización denominada a favor de la familia comenzó a las 10:00. Partió del Parque Centenario por la 9 de Octubre, en el centro de Guayaquil. Luego continuó por la avenida Malecón Simón Bolívar.
La maestra Mónica Baquero elevó su voz de protesta con un afiche rosa. En este se leía: nací mujer, no admito confusión. Para esta educadora resulta necesario que la formación y guía de los niños parta de las doctrinas y los valores del hogar. “Somos respetuosos de las ideologías de las demás personas y su pensamiento. Por eso pedimos el mismo respeto”, dijo.
En octubre del 2017 se llevó a cabo la primera movilización de estos grupos. Con el hashtag #ConMisHijosNoTeMetas los participantes cuestionaron el proyecto de Código Orgánico de la Salud (COS), que todavía se debate en la Asamblea, y la Ley Orgánica para la Erradicación de la Violencia de Género contra las Mujeres.