Jones tiene fama de ser una estrella reservada, de pocas palabras y a menudo respuestas afiladas en las entrevistas. Foto: Archivo AFP
Sus profundas arrugas, barbilla angulosa y cruda mirada hacen de Tommy Lee Jones el actor perfecto para encarnar personajes temibles. En ‘Mechanic: Resurrection‘ interpreta a un astuto traficante de armas, mientras que en ‘Jason Bourne‘ se convierte en el jefe de la CIA.
Pero ahora, a punto de cumplir 70 años, se sale de su papel para protagonizar una comedia de acción. En ‘Villa Capri‘, Jones y Morgan Freeman se convierten en un exagente y un exabogado continuamente enfrentados pero que tienen que aprender a convivir.
La película se rueda hasta finales de mes en Albuquerque y Santa Fe, por lo que coincide con el cumpleaños del actor, el 15 de septiembre. Por el momento no ha trascendido cómo piensa celebrar Jones sus 70 años, algo que no sorprende.
Jones tiene fama de ser una estrella reservada, de pocas palabras y a menudo respuestas afiladas en las entrevistas. Tampoco se libran de ello sus compañeros de reparto y directores. Sally Fields, por ejemplo, no contaba nada bueno tras el rodaje de ‘Back Roads’, mientras que en ‘Batman Forever‘, Jim Carrey y el director Joel Schumacher acabaron en pie de guerra contra él.
Casado por tercera vez, padre de dos hijos y amante del polo y la cría de caballos, Jones vive apartado de Hollywood en un rancho en su Texas natal. Allí rodó su primer proyecto como director, el neo-western ‘Los tres entierros de Melquiades Estrada’ (2005), una película sobre venganza, amistad y conflictos sociales en la frontera entre México y Estados Unidos.
La película, que pasó por el Festival de Cannes, no le granjeó ningún premio como director aunque sí como protagonista. En el certamen francés también presentó ‘The Homesman’, un oscuro western en el que Hilary Swank interpreta a una intrépida granjera y él se mete en la piel de un tosco forajido.
Jones nació el 15 de septiembre de 1946 en San Saba y por sus venas corre sangre indígena de su abuela cherokee. Durante su adolescencia ayudó a su padre en los campos petrolíferos y consiguió estudiar en una universidad de élite gracias a una beca deportiva.
En Harvard, donde compartió habitación con el futuro vicepresidente estadounidense Al Gore, se licenció con matrícula de honor en filología inglesa. Actor aficionado, pasó por varios teatros de Nueva York hasta que aterrizó en Broadway.
Saltó a la gran pantalla gracias a la ayuda de su compañero de Harvard Erich Segal, guionista de ‘Love Story’ (1970) y quien escribió un pequeño papel para él. Su carrera ascendió a través de innumerables papeles secundarios en los que se alternaba como guardián de la ley y saltándose las normas. S
u primera nominación al Oscar le llegó con ‘JFK‘, de Oliver Stone, quien curiosamente nació el mismo día que él. Finalmente consiguió la estatuilla como actor secundario en ‘El fugitivo‘, donde daba caza al Dr. Kimble, interpretado por Harrison Ford.
En sus más de 40 años de carrera ha trabajado con los mejores directores de Hollywood. A las órdenes de los hermanos Coen se transformó en el sheriff de ‘No es país para viejos‘, protagonizada también por el español Javier Bardem, mientras que para Steven Spielberg interpretó a Thaddeus Stevens en ‘Lincoln‘.
Pero Jones también es capaz de hacer reír al público con trabajos como la saga ‘Hombres de negro‘, en la que compartió pantalla con Will Smith en la lucha contra los alienígenas, o junto con Meryl Streep en la comedia ‘Hope Springs‘, en la que acaba asistiendo a terapia de pareja. Ahora, a los 70, volverá a mostar ese lado cómico en ‘Villa Capri‘ junto con Rene Russo, aunque para ver ese trabajo habrá que esperar hasta 2017.