Ricardo Arjona inició su gira de conciertos por Ecuador, en Guayaquil, en el estadio Alberto Spencer. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO
A las 19:00 el congestionamiento vehicular se apoderó de la avenida de las Américas, que conduce al Estadio Alberto Spencer.
Un guatemalteco al que apodan ‘el flaco’ era el culpable. Era Ricardo Arjona, que ayer, 20 de agosto, comenzó su ‘Viaje’ en Guayaquil acompañado durante casi tres horas por unas 26 000 personas que corearon sus canciones hasta la media noche.
Su gira, Viaje, que lo llevará por Chile, Uruguay, Paraguay, México y Argentina, en Ecuador arrancó en Guayaquil. Las siguientes paradas serán Manta y Quito.
En un escenario que evocaba una estación de tren, gracias a una pantalla en la que se proyectaban paisajes desde una ventana de lo que simulaba ser un tren, Arjona hizo un recorrido musical en el que ofreció sus temas más recientes como A la luna en bicicleta, Apnea y Fuiste tú, pero también esos clásicos que los fanáticos no le perdonan en ningún show: Señora de las cuatro décadas, Te conozco, Historia de taxi y Mujeres.
Fue una noche de romance, de gritos de histeria al escuchar los primeros acordes de las canciones con las que el guatemalteco se hizo famoso, de carteles con piropos para el compositor al que sus fanáticos consideran un poeta, un cantante de metáforas.
En las localidades las parejas abrazadas coreaban los temas y pocas veces bajaban los celulares con los que registraban para el recuerdo los movimientos de ‘el flaco‘, que recorría el escenario y filosofaba antes de algunas canciones, dando pistas de lo que se vendría.
Cerca de 26 000 personas corearon las canciones de ‘el flaco’ durante su concierto en Guayaquil. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO
La noche guayaquileña que estuvo fría, por ejemplo, le ayudó a anunciar Pingüinos en la cama, “hace como frío hoy, ¿verdad?”, dijo y en la pantalla se proyectó un video de una nevada, “vamos aclarando el panorama…”,comenzó a cantar.
Uno de los momentos de más euforia lo provocó una ‘señora de las cuatro décadas’ que subió al escenario cuando el intérprete cantó el tema. La mujer se aferró a Arjona y lo beso mientras pudo. Él solo río y cuando la emoción de la mujer menguó, la dejó sentarse en sus piernas.
Cavernícolas, El Amor, Lo poco que tengo, Minutos, cerca de 30 canciones se tomaron el estadio en la voz de los arjonianos y de su ídolo en el estadio Alberto Spencer; y a las 00:00, cuando acababa el show, el tráfico volvió a apoderarse de la avenida de Las Américas.