La cuestión de la música sacra no solo atañe a monjes y maestros de capilla. Como una manifestación de las personas que intentan establecer una conexión con lo divino, dentro de este género se incluyen también cánticos y ritmos que forman parte de los sistemas de creencias de los humanos. Y esta semana eso se hará evidente en el XIII Festival de Música Sacra que comenzó ayer.