El Mundo Andino continúa con su lucha por rescatar sus tradiciones ancestrales. Desde inicios de febrero se dio paso a la celebración del Pawkar Raymi o Fiesta del Florecimiento en español.
La banda ecuatoriana Papá Changó fue una de las teloneras del músico marfileño Alpha Blondy el pasado sábado, 6 de febrero del 2016, en el concierto que se llevó a cabo en Peguche (Otavalo) por las celebraciones de Pawkar Raymi. El grupo de reggae latino protagonizó una polémica cuando uno de sus integrantes, Iván Paredes 'Diablo', se bajó los pantalones en la tarima ante supuestas ofensas que recibió por parte del público.
Una hora y 20 minutos de concierto ofrecerá el cantante de reggae Seydou Koné, mejor conocido como Alpha Blondy, en la comunidad indígena de Peguche, en Otavalo (Imbabura).
En algunas comunidades kichwas de Otavalo, en Imbabura, los vecinos son conocidos más por sus ‘motes’ que por sus nombres. Los apodos se toman a partir de características físicas y anímicas de cada sujeto o de alguna anécdota. Entre las mujeres no es común esta costumbre.
El ritmo del sikuri alegró el inicio de la celebración del Pawkar Raymi (Fiesta del Florecimiento, en español), en la comunidad indígena de Peguche, en Otavalo, provincia de Imbabura.
El crudo invierno en Europa y Estados Unidos marca el regreso de los músicos y comerciantes indígenas otavaleños. La tendencia se mantiene entre diciembre y febrero.
Aunque la algarabía se iniciará oficialmente el 31 de enero, la música del Pawkar Raymi se escucha desde esta semana. El martes último, una delegación de priostes, como se denomina a los padrinos de esta fiesta indígena, visitó la Vicepresidencia de la República, para entregar invitaciones a las autoridades.
Bomberos, militares y policías trabajan para sofocar un incendio forestal en la ciudad de Otavalo, provincia de Imbabura, situada en el norte de Ecuador.
La comunidad de Peguche, en la ciudad de Otavalo, provincia de Imbabura, en el norte de Ecuador, inició desde hoy, 8 de febrero, la ceremonia del Pawkar Raymi 2015.
El ruido de los telares eléctricos, que funcionan dentro de las casas de Peguche, en Otavalo, se escucha hasta las calles.