El presidente argentino, Mauricio Macri, avanzó en su afán de poner fin a la ley antimonopólica de medios audiovisuales al eliminar a los entes que velaban por su cumplimiento, para acabar con la “guerra contra el periodismo” que le reprocha a la exmandataria Cristina Kirchner.
El grupo Clarín repudió hoy, 2 de febrero del 2015, que el jefe de Gabinete argentino, Jorge Capitanich, rompiera en una rueda de prensa dos páginas del principal periódico de ese conglomerado en el que se informaba de la supuesta existencia de un borrador de la denuncia del fiscal Alberto Nisman, fallecido en circunstancias no aclaradas.