Los rumores se regaron como pólvora: puerta a puerta se pedía a los quiteños evacuar las casas ante un supuesto terremoto. Incluso vaticinaron la hora: 23:00 del sábado 16 de agosto. También lo hicieron a través de llamadas y en redes sociales.
Proyectos masivos en marcha, casa nueva (o para ser exactos: restaurada), invitados ilustres y el inmenso reto de penetrar con su trabajo en la vida de la gente común. Así encuentra su aniversario número 140 a la Academia Ecuatoriana de la Lengua (AEL).
Un contrato similar al que preveía suscribir la Secretaría de Comunicación con Merpubli, para la difusión y monitereo de redes sociales, se dio al interior del Ministerio de Recursos No Renovables.