El ministro del Deporte, Sebastián Palacios dijo que, tras los resultados de Ecuador en los Juegos Olímpicos de Tokio, se iba a marcar un antes y un después para el deporte nacional, pero a la fecha no hay cambios.
El fisioterapeuta Caridad Martínez, sigue aún impago, pese a haber trabajado con el equipo de atletismo de velocidad y las pesistas Neisi Dajomes, Tamara Salazar y Angie Palacios en los Olímpicos.
“Comenzamos a trabajar desde enero, y el actual Ministerio del Deporte quiere hacerme el contrato solo desde junio. No he cobrado ningún centavo por ocho meses”, responde Caridad Martínez, el profesional que trabaja con los deportistas del Alto Rendimiento desde los años 90.
Formó parte del equipo multidisciplinario de Jefferson Pérez, luego estuvo con la pesista Alexandra Escobar y últimamente colaboró con el equipo de atletismo, que lo dirige Nelson Gutiérrez.
Los errores de contratación con Caridad Martínez vienen desde la pasada administración. La exsecretaria del Deporte, Andrea Sotomayor, fue quien le notificó, en abril pasado, que su contrato estaba suspendido.
La Federación Ecuatoriana de Atletismo (FEA), que preside Manuel Bravo, no hizo ninguna petición, pese a que Caridad Martínez trabajaba con el equipo de velocidad en el exterior. En marzo viajó a Estados Unidos y en abril, junto al relevo femenino 4×100 metros asistió al Mundial en Polonia, donde logró la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio.
Pese a que el contrato estaba aún sin confirmación, la dirigencia de la FEA, envió a Juan Caicedo, atleta de lanzamiento de disco que estuvo en los Olímpicos, hasta Portugal para que se recuperara con Martínez. “No podemos negarnos cuando un chico viene con nosotros”, dijo el fisioterapeuta.
El relevó 4×100 metros, con el que también se entrenó Álex Quiñónez llegó a Tokio el 22 de julio. Caridad Martínez se unió al resto de la delegación y allí trabajó con Neisi Dajomes, Tamara Salazar y Angie Palacios. “El entrenador ruso Alexei Ignatov me pidió que trabaje con las chicas antes y durante su participación. Nos conocemos desde hace tiempo”.
El ministro Sebastián Palacios había ofrecido revisar su caso, por la trascendencia del trabajo de Caridad Martínez, pero al retornar al país, le ofrecieron un contrato desde junio, ya que Palacios asumió la cartera de Estado desde mayo.
“Quiero llamar a la reflexión. No es justo que un profesional sea tratado así. Él trabaja con nosotros todo el tiempo. Está pendiente de la rehabilitación, no solo de nuestros atletas, sino de los deportistas del país”, dijo el entrenador Nelson Gutiérrez, jefe de las selecciones ecuatorianas de velocidad.
Caridad Martínez hace cinco año le abrió las puertas de su casa al atleta Álex Quiñónez, cuando pidió una oportunidad para retornar a las pistas. Le brindó techo y comida, por tres años, aproximadamente.
La Federación Ecuatoriana de Atletismo recibió del Estado USD 1 368 881,51 para la preparación de los atletas rumbo a los Juegos de Tokio. Además, el Comité Olímpico Ecuatoriano recibió más de USD 500 000 para la preparación de la delegación a los Olímpicos.