Narciso Mina despertó hoy más temprano. Habitualmente lo hace a las 06:30, para ir a entrenarse, pero este domingo tuvo descanso y lo hizo a las 10:00. Cuando salió de la cama, lo primero que hizo fue buscar y revisar su celular.
En ese momento vio un mensaje de texto. Decía: “Dios es fiel y cumple los sueños”. Se lo había enviado un pastor de la iglesia cristiana a la que asiste con frecuencia. Era la frase que Mina estampó en una camiseta que mostró hace dos semanas después de que los canarios se clasificaran a la final del Campeonato.
Dios es fiel, según cuenta, porque lo trajo de regreso a Barcelona después de su inadvertido paso por el club en el 2009. Y cumple los sueños porque el equipo logró la clasificación a la final del Campeonato Nacional de este año.
Después de leer ese mensaje, el goleador de los canarios y del torneo con 18 tantos, hizo una oración en su mente. Así se lo reveló esta mañana a este Diario vía telefónica. “Gracias Dios por cumplir este sueño y por darme esta revancha”, dijo antes de rasurarse las barbas y los bigotes. Se los había dejado crecer como “castigo” por no haber marcado.
La huelga, como la llamaba, terminó la semana pasada. El lunes pasado compró una nueva máquina de rasurar en un supermercado. Dice que lo hizo porque no volverá a atravesar por más “sequía de goles”.