La libertad es un derecho de todos y todas que nos permite decir y hacer la cosas tal como las pensamos.
Es un tesoro invalorable y es un bien inviolable e insustituible que debemos defender sobre cualquier imposición. Ser libres es vivir la vida con intensidad y con respeto no solo a uno mismo sino también a las demás personas.
No se puede ser libre cuando alguien le impone a otra persona una manera determinada de pensar y de actuar. Ser libres es hablar en base a lo que uno cree y reflexionar a partir de la educación y de los principios que cultivamos desde la niñez.
La libertad de pensamiento es de todos y por eso debemos respetar lo que otros piensan así no estemos de acuerdo con aquello. Es tener la apertura para escuchar y discutir, pero no para cuestionar e imponer criterios.
Un futbolista es libre porque ha decidido hacer del fútbol su carrera y vive de ella. Somos libres porque decidimos en qué equipo jugar. En fin, la libertad no se compara con nada.