La selección de Ecuador fue eliminada en primera fase del Mundial Brasil 2014. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
Los ingresos que la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) recibe por la clasificación y participación de la Tricolor en el Mundial y la repartición de premios a los seleccionados han generado un debate luego de la eliminación del equipo del torneo internacional.
Fernando Iglesias, ingeniero en ciencias empresariales, especializado en Negocios y Administración y en Análisis de Marketing en la Universidad de San Diego, Estados Unidos; brindó su punto de vista acerca de la gestión empresarial de la Ecuafútbol en torno a la administración de recursos y la repartición de premios a los jugadores.
La FEF recibió USD 9.5 millones por parte de la FIFA. Y, por pedido de los jugadores, el 60% (USD 4.8 millones) de esta cantidad será destinado a sus premios.
Iglesias, quien también ha colaborado con clubes del fútbol ecuatoriano en la elaboración de sus planillas de premios a los jugadores, considera que el país no ha evolucionado en la administración deportiva.
A continuación el punto de vista de Fernando Iglesias:
“Primero los rubros que se recibirán y la repartición que se hará deben ser estipulados por escrito, antes del torneo. Debe quedar sentado el porcentaje que los jugadores van a recibir por cada gol, partido, triunfo o empate.
Porque sino se puede crear un malestar entre dirigentes, jugadores y la hinchada. Por los comentarios informales que se pueden dar sobre el tema, sobre todo si los resultados son catastróficos. En este caso el de la Selección, desde mi punto de vista, es catastrófico porque las expectativas del equipo para el Mundial estaban por encima de lo ocurrido.
Así, además se evitará que la imagen del jugador se deteriore y quedé como un mercantilista, que piensa en el dinero antes que en el orgullo de jugar por su país en un Mundial.
Además, esta repartición debe ser transparente. Actualmente, En la página web de un club internacional y de las federaciones de cualquier país esto se publica de manera específica, antes de cada competencia.
No sé porque aquí se maneja de una manera misteriosa para los medios y para el público en general. Los medios necesitan estos datos como herramienta de trabajo. Además, así se evitaría reclamos de la gente por premios supuestamente excesivos, teniendo en cuenta los resultados.
La administración deportiva en el país no ha avanzado. Nuestro país todavía no es una estrella mundial en el fútbol. Dado a la mala gestión administrativa.
El porcentaje que se destina para los jugadores es del 60%, quiere decir que el 40% debería repartirse entre los clubes, que invierten formativas, promueven jugadores y luego representan ganancias para la Federación y para el país.
Los recursos de la FEF deben ser manejados de una manera más coherente porque estamos progresando. Se debe invertir creando centros de entrenamientos. Los recursos se agotan y por eso es mejor invertirlos en infraestructura y accesorios deportivos.
Esa política tiene que venir desde arriba pero lamentablemente los dirigentes del fútbol ecuatoriano no lo ven así”.