El DT de Ecuador Sub 20, Sixto Vizuete, reflexiona sobre las posibilidades en el Mundial de Colombia. Sostiene que recién ahora el estratega local
recibe apoyo de la FEF.
¿Los mundiales Sub 17 y 20 serán otra oportunidad para que el técnico nacional vuelva a ser evaluado o mostrar su capacidad?
Indudablemente. Los técnicos que logramos un cupo para los mundiales debemos recibir la oportunidad de seguir trabajando para la Federación Ecuatoriana de Fútbol. Hay buenos entrenadores nacionales, pero como siempre se repite, falta confianza por parte de los directivos locales. Contratan a técnicos extranjeros y así sean malos, les vuelven a dar la confianza. Por eso andan de club en club en el país, sin buenos resultados.
¿A qué debe aspirar Ecuador en el Mundial Sub 20 de Colombia?
Deseo quedar entre los cuatro primeros del mundo. Se puede soñar, pero tampoco se puede jugar con la ilusión de la gente, hay que ser realistas. Lo que permite aspirar a esa posición fue que en el último sudamericano ganamos a los argentinos y uruguayos, los brasileños nos ganaron pero con las justas. Por eso tengo la esperanza de realizar un gran Mundial.
En la categoría Sub 17, aparentemente, no existen superioridades notorias de una selección a otra. Visto así, ¿cuál deberá ser el propósito de Javier Rodríguez?
Principalmente, realizar un gran mundial. Tiene muy buenos jugadores. Fue un acierto incorporar a Luis Cangá porque a Ecuador le faltaba un jugador corpulento. Es cierto que en estas categorías el nivel futbolístico es más parejo, pero los futbolistas europeos y africanos suelen ser de mayor fuerza. Además, como mencioné anteriormente, hay que soñar, pero hacerlo con los pies en la tierra.
¿Cómo evita usted algún posible manoseo de directivos o entrenadores que buscan impulsar a determinados jugadores?
En mi caso, citaré a 30 jugadores. De ellos saldrán los 21 seleccionados que irán al Mundial (de Colombia). Estos chicos están a la vista de todos, porque son quienes se destacan en sus clubes. Es decir, llamaré a quienes están en buen momento y mantendré la base que logró la clasificación en Perú. Así, no habrá ningún manoseo, todo el proceso será transparente. Lo único que conversamos con los técnicos de los clubes es sobre el aspecto personal.
Aparecieron nuevos jugadores que son titulares en sus clubes. Ellos disputarán un puesto con aquellos que jugaron el Sudamericano pero no son titulares en sus equipos. ¿Cómo manejará esta presión?
Pesará los torneos sudamericanos que tengan principalmente. Un ejemplo: Christian Cruz es un gran lateral zurdo que apareció en Barcelona, con buena técnica y ejecutorias. En esa posición jugóÉder Fuertes, en Perú. Este en cambio realizó todo el proceso en selecciones desde la Sub 15. Es decir, sin detallar quién podría ser titular, se tomará en cuenta esa experiencia. Quiero jugadores con actitud ganadora y espíritu combativo en la cancha.
Antes de viajar, los jugadores de la Selección Sub 17 dijeron que buscarán el título. ¿Las generación actual es ganadora?
Ver a Ecuador en dos mundiales, los triunfos de Liga en los torneos internacionales, mirar lo que hizo Antonio Valencia en el Manchester United y Felipe Caicedo en el Levante… son muchas acciones que motivan a los futbolistas que surgen. Ecuador siempre ha tenido buenos jugadores históricamente, pero ahora se sienten más seguros de lo que pueden conseguir. También influye la motivación del entrenador.
¿Independientemente de si el técnico es nacional o extranjero?
No, el técnico nacional sí ha sido exitoso y sabe llegar al jugador. El ecuatoriano siempre ha sido profesional, solo que ahora por fin recibe una verdadera oportunidad. Eso se evidencia en los resultados de los últimos 10 años: tres mundiales juveniles (ndlr: con el Mundial Sub 20 del 2001 en Argentina) y un título Panamericano. Además, quienes sacamos a relucir a los chicos somos los técnicos nacionales, porque somos quienes trabajamos en las divisiones menores.
¿Ahora se puede dar un mejor proceso desde las inferiores hacia el combinado mayor?
El abastecedor directo es la Sub 20. El ejemplo más claro es Renato Ibarra. Él se destacó en el Sudamericano, llegó a El Nacional y se ganó el puesto de titular. Fue a Argentina para el amistoso con la Selección mayor y fue considerado la figura. Hasta por cédula ya es un aporte, hablando de su edad. En cambio, un chico de 17 años no tiene la fortaleza física ni mental para afrontar la presión del equipo absoluto. Hay excepciones pero muy marcadas, como Pelé en Brasil.
¿Lo ideal sería que el técnico que dirigió a la Sub 20 asumiera el control del equipo mayor para seguir ese proceso formativo?
El proceso eliminatorio dura cuatro años. A la Selección mayor deben ir los mejores jugadores del Sub 20. Eso conversamos con el DT Reinaldo Rueda. Por eso se probó a chicos como Marlon de Jesús, Edson Montaño, Ibarra, entre otros. Pueden ser aporte en cualquier momento, ya con mayor experiencia.
¿Con su experiencia en eliminatorias y torneos sudamericanos, cómo ve el nivel de Ecuador para la Copa América?
Tenemos muy buenos jugadores. En el último partido ante Grecia se vio la base que afrontará el torneo. El plantel tiene que darle tiempo al entrenador para conocerlo, asimilar sus conceptos y después trabajar en equipo. Hay que recordar que todo proceso requiere de tiempo y paciencia.