Entrevista. Leandro Simbaña, fisioterapeuta de El Nacional, corre más que un futbolista
Cuando un jugador de El Nacional se lesiona, usted sale corriendo de la banca. ¿No es un poco exagerado lo que hace?
Digamos que es una marca propia, un sello personal. Eso empezó hace cuatro años cuando el DT de El Nacional era el ‘profe’ Pinto (Jorge Luis). Él nos tenía al doctor y a mí como fisioterapista en la banca y cuando había lesionados, nos mandaba a la cancha con recados para los jugadores. Me tenía corriendo de un lado para el otro diciéndole a todo el mundo que hagan el bloque, que mantengan el sistema.
¿Se ha tomado el tiempo para saber cuánto se hace en un ‘pique’ de la banca a la cancha?
La verdad no, pero mucha gente me dice que debería tomarlo, saber cuánto me demoro, debe ser poquito. En el próximo partido le prometo que pongo el cronómetro.
¿Cuál fue la primera reacción de los aficionados al verlo correr así?
Al principio se sorprendieron, pensaban que alguien estaba gravemente herido, luego ya vieron que lo hago siempre. Pero esa es mi entrega, mi disposición, cuando un jugador está lesionado quiero socorrerlo pronto.
Y los árbitros ¿qué reacción tienen con usted?
A muchos no les gusta lo que hago. Varios me han dicho que, si hago alguno de mis piques, me van a amonestar, porque dicen que estoy provocando al público a la violencia.
Y usted ¿qué dice?
Yo digo que no, que no es así. No insulto a nadie, no hago señales obscenas, simplemente voy corriendo al objetivo que es el jugador lesionado, hago mi trabajo y regreso con la misma intensidad a mi banca y me siento.
Hubo un juez que quiso expulsarlo en un cotejo.
No recuerdo su nombre, pero tengo clara su imagen. A él no le gusta nada lo que hago. De hecho, siempre me molesta desde que salgo del camerino: me dice ‘a ver usted, ¡cuidado con hacer la suya! Yo le decía al ‘profe’ Sevilla si a usted no le molesta lo que hago, pues lo seguiré haciendo, lo que diga el árbitro no me importa.
Pero ¿también hay réferis que lo apoyan?
Alguna gente lo tomó bien, ahora hay muchos árbitros nuevos que me dicen: ¿Cómo le va ‘correcaminos’?, ¡Usted es el hombre mas rápido! me preguntan qué voy a hacer ahora o qué preparé.
Hablando sobre eso, en los últimos juegos, le ha añadido más cosas a sus piques: correr hacia el córner, cambiar de velocidad, desplazarse de reversa. ¿Por qué?
Son gestos de acción de entrenamiento que la hacemos acá, yo quiero que cada día los gestos sean más vistosos. Hay veces que cuando llego donde el jugador lesionado me pego una ‘barridita’ o voy de rodillas. Me he pegado trampolines en los partidos también.
¿Es verdad que un día se lesionó en Guayaquil?
Me dio un tirón por no calentar. Sentí el dolor, pero me tocó seguir corriendo. Máximo Banguera hasta ahora me ve y me molesta y me dice casi te lesionas ese día por correr.
Los hinchas rivales le gritan de todo cuando hace esos gestos.
Pues al comienzo tenía mucha resistencia, sobre todo en la Costa me gritaban de todo. Ahora ya llego a los camerinos y la gente me abraza, me dice: usted es el que corre o ‘profe’ tomémonos una fotito. La gente ahora está esperando que la gente se caiga para que yo vaya corriendo.
Ahora es una referencia obligada de las cámaras de televisión. Sus corridas en los partidos siempre se televisan…
Mis hijos (Emilio de 6 años y Aaron, de 4) son mis hinchas número uno. Ellos siempre me dicen al final del partido: “Papi te filmaron durante todo el recorrido y dijeron tal cosa de ti en la televisión”.
¿No es muy ‘figureti’ todo lo que hace?
No lo creo, simplemente le meto mucha pasión a lo que hago. Una cosa que quiero resaltar es que los fisioterapeutas, los kinesiólogos somos parte del cuerpo técnico y somos profesionales. Hay mucha confusión respecto a que nosotros somos masajistas y esa no es solo nuestra responsabilidad.
En YouTube hay muchos videos de sus actuaciones ¿Los ha visto?
Sí, claro, el primer video que salió fue hace un par de años en un juego ante Barcelona. De hecho, tengo guardado en mi celular ese video.
Incluso el diario AS de España publicó su imagen. Le ponían como ‘el doctor más rápido del fútbol’
Jaja, fisioterapeuta debían poner. Sí, realmente a mí me da mucha gratitud en el sentido personal, para mí todo eso son pequeños homenajes.
¿Cuál es el jugador que más celebra lo que hace?
Bueno, ahora nos estamos conociendo con los jugadores, todos son jóvenes o nuevos. Pero antes, por ejemplo con José Madrid, con Javier Chila eran los que más me incentivaban. Ellos me decían: bótate así, haz tal movimiento. Me remedaban en los viajes, cuando volvíamos.
Y cuando El Nacional está ganando y necesita quemar tiempo, ¿también es acelerado?
No pues, ahí cambia la estrategia. De hecho, a veces Pita me pide no correr en esos momentos. El ‘Capi’ me dice bájale un poquito el ritmo, estamos ganando. En el fútbol ya está todo escrito y yo no voy a correr, cuando el equipo necesita que haga las cosas más lento.
¿Se considera un futbolista frustrado?
Yo diría más bien que lo mío en el fútbol es como una herencia de mi padre Gustavo Simbaña, quien jugó en Aucas. Él quería que yo sea jugador, pero a mí no me daban las condiciones.
HOJA DE VIDA
Leonardo Simbaña
Su biografía. Nació el 14 de noviembre de 1975. Es licenciado en fisioterapia y estudió una especialidad en Argentina.
Su experiencia. Lleva 17 años en El Nacional. Desde hace cuatro entra a la cancha corriendo.
Hay ocasiones que cuando llego donde el jugador lesionado me pego una ‘barridita’ o voy de rodillas. Me he pegado trampolines en los partidos también. A muchos árbitros no les gusta”.