El empresario mexicano Carlos Slim y el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, han propiciado con su apoyo que la Fórmula 1 del próximo año sea la más latina de los últimos años.
El mexicano Sergio Pérez, con Sauber, y el venezolano Pastor Maldonado, con Williams, debutarán el 13 de marzo, en el Gran Premio de Bahréin, gracias a su talento, pero también al apoyo económico de sus mecenas.
Slim, uno de los hombres más ricos del planeta y cuya fortuna, según la revista Forbes, asciende a USD 53 500 millones, ha hecho posible que el equipo suizo Sauber tenga acento mexicano.
A Pérez, de 20 años, se le unirá Esteban Gutiérrez, de 19 y campeón de la serie GP3, como piloto de pruebas. Slim es propietario de la compañía telefónica mexicana Telmex, que será patrocinadora del equipo suizo, lo que facilitó el fichaje de Pérez, subcampeón de la serie GP2.
Sauber tuvo muchas dificultades a lo largo del 2010 para encontrar ‘sponsors’. El ascenso de los dos pilotos mexicanos apoyados por Telmex podría derivar en un futuro próximo en que la firma sea socia de Sauber.
Pérez es el quinto mexicano que llegará a la Fórmula 1 y el primero en 30 años, desde Héctor Rebaque en 1981. “Tenía seis años cuando mi padre y mi hermano me llevaban a los karts. Desde entonces soñaba con la Fórmula 1”, dijo Pérez, cuya familia está muy relacionada con el automovilismo. Su hermano ha ganado la serie Nascar de México.
“Los mexicanos están entusiasmados y eufóricos por tener de nuevo a un piloto en la Fórmula 1”, dijo el piloto. Y en esta competencia que ansía abrir nuevos mercados, el siguiente paso quizás sea un Gran Premio en México, tras los inútiles intentos por llevar uno al balneario mexicano de Cancún en los últimos años.
Pero Pérez no estará solo portando la bandera latina. Maldonado, de 25 años, estará al volante de un Williams con ayuda de la poderosa petrolera estatal Pdvsa. “Tengo todo conmigo, el apoyo de mi país, de mi gobierno y de todos los patrocinantes, que son venezolanos. Sin ellos no estaría aquí”, decía a la agencia Dpa en mayo de 2009.
Ya entonces avanzó la importancia de la ayuda de Chávez. “Su apoyo ha sido incondicional, no solo monetario, también moral y eso nos ayuda a confiar en nosotros. Chávez nos llama y siempre está pendiente de las carreras y de los resultados”, afirmaba.
El piloto es un entusiasta simpatizante del Presidente. El Gobierno bolivariano ya aseguró que los patrocinadores públicos mantendrán en Williams el respaldo económico que dieron a Maldonado este año en la categoría de la GP2, de la que fue campeón.
Y es que además de la petrolera estatal, entre los patrocinadores se encuentran la telefónica CANTV, el Banco de Comercio Exterior (Bancoex), el Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela (Bandes), el Instituto Nacional para el Deporte (IND) y el Ministerio de Turismo.
Maldonado será el primer piloto venezolano que compite en la Fórmula 1 desde que Jphnny Cecotto lo hizo en 1984.