“Hoy por ti mañana por mí”, pareciera ser el argumento de jefes militares y funcionarios de un Estado que en 30 años no ha mejorado en materia de derechos humanos.
A muchos de ellos, los incomoda abiertamente, mientras que otros usan el tema solo como propaganda. La reparación integral a víctimas hasta ahora no muestra hechos concretos.Pretender cambiar la Constitución para entregar a esas Fuerzas Armadas labores policiales bajo el nombre de “apoyo a la seguridad integral del Estado”, es una muestra del momento que vivimos.