Ecuador, país socialista
Estas ideas vienen desde 1930, con el movimiento sindical seducido por los ideales de Karl Marx, para echar raíces en las empresas y en el Estado. En un estudio de un grupo de investigaciones económicas de la Universidad de Múnich, dice que en el 2008 en Ecuador Rafael Correa al año siguiente aumento el salario de $ 170 a $ 200, esto afecto al 35% de los empleados del sector privado, además causo desahucios, recuerden bien el 35% porque es el voto duro de Rafael Correa, el otro 65% quedo en la informalidad. El Ecuador es un País con leyes socialistas, para que el Estado lo controle todo, y no se haga nada, el presidente no puede gobernar, está sometido a una mayoría en la asamblea de un partido político en el que todos sus dirigentes están presos o prófugos. El Ecuador es un Estado socialista, burocrático y obeso, sumido en déficit fiscales; debemos reducir el tamaño del Estado y salir del asfixiante socialismo. Si el nuevo presidente quiere cambiar las cosas debe salir de la Constitución de Montecristi y regresar a la constitución de 1998 como proponen algunos juristas. En el tema seguridad el nuevo presidente debe entender que las guerras modernas son dentro de las fronteras del país, con la delincuencia y las mafias del narcotráfico donde su mejor arma es la ley metálica “plata o plomo” para someter a la justicia, por esto el País necesita una solución radical, no podemos tener resultados diferentes haciendo siempre lo mismo, el nuevo presidente tiene que comprender que el país está en guerra, y asumir su rol de comandante en jefe de las FFAA manejar la guerra interna con la acción y justicia militar, en donde primero están los derechos humanos de las víctimas y no de los delincuentes.
Juan Orus Guerra