¡Bienvenido, Francisco!. Todo tuyo es Ecuador, que te acoge emocionado con espiritualidad y amor. De tu Vaticano Estado al corazón ecuatorial, eres embajador ilustre mensajero del mismo Dios. Bienvenido Santidad de San Pedro sucesor, jesuita sacerdote argentino cardenal. En el espacio aéreo de nuestro Ecuador, ángeles de Dios guían tu pontificio avión. Bienvenido Francisco gran líder universal, de tu humildad y paz se contagie la nación.