La polémica por las bajas tarifas que ofrecía LAN quedó atrás. Al menos para Ícaro y Tame, que ahora optan y justifican esta estrategia. “Las ofertas son permitidas en el mundo”, asegura el titular de Ícaro, Guido Saltos.
Mientras el presidente del Directorio de Tame, Leonardo Barreiro, defiende también como una “práctica habitual en el mercado internacional”, su oferta de USD 49,5 (Quito-Guayaquil o viceversa) en las compras de última hora. “Nunca nos opusimos al ingreso de LAN”. Eso, pese a que desde sus oficinas se denunció de tarifas predatorias. “Eso fue un error y lo corregimos”.
Solo Aerogal mantiene una disputa abierta con LAN, pero ya no por tarifas. Según su presidenta ejecutiva, Gabriela Sommerfeld, “el ingreso en sí de la compañía adoleció de fallas”.