El operativo se realizó al mediodía de este miércoles 5 de agosto del 2015 en tres puntos diferentes de Quito. 23 funcionarios que trabajan en los centros de revisión vehicular de Carapungo, Guamaní y el Valle de los Chillos fueron detenidos por la Policía Judicial (PJ) y la Fiscalía.
En horas de la tarde, fueron trasladados en un bus a las salas de Flagrancia. Según los uniformados, se los investiga porque supuestamente se “logró determinar que cometían irregularidades en los centros de atención ciudadana. El delito es tipificado como violación de sistemas informáticos y concusión”.
Un alto oficial explicó que existía una red que supuestamente se encargaba de ingresar en el sistema informático a los vehículos que no aprobaron la revisión vehicular.
“El negocio consistía en que los vehículos que no pasaban la revisión eran ingresados al sistema y se los inscribían como aprobados”, dijo un investigador. Además, se conoció “que algunos vehículos no iban a la revisión. Estamos en las indagaciones y veremos lo que determinan los jueces”.
Los agentes explicaron que la investigación de este caso duró cinco meses y se recolectaron evidencias para determinar la responsabilidad de cada uno de los apresados.
En el operativo intervinieron uniformados del Grupo de Operaciones Especiales (GOE), la Unidad Antimotines (UMO) y Criminalística. “Se detuvo a 23 personas. De ellas, 13 son del centro de revisión vehicular de Carapungo, 5 de la misma entidad en Los Chillos y 5 de Guamaní”.
Tres de los detenidos eran jefes de sección –indicaron en la Policía- y el resto, trabajadores que hacen pasar la revisión. Es decir, unos veían las luces, otros las llantas o el motor…
Uno de los oficiales que intervino en el operativo indicó que los mismos directivos de la empresa de revisión vehicular pusieron la denuncia y pidieron que se investigue este caso.
Los familiares y amigos de los detenidos en el operativo acudieron a flagrancias para conocer lo que había pasado. Ellos lloraban decían que sus allegados son profesionales (ingenieros y tecnólogos automotrices) y gente que trabaja honestamente. Aseguraban que las detenciones eran injustas y esperaban que comience la audiencia de formulación de cargos.
Pasadas las 18:30, los parientes esperaban que se realice la audiencia y esta aún no comenzaba.