En Cumbayá, La Primavera, los precios del metro cuadrado de terreno, en este mes, llegaron a USD 174. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO
La apertura de la Ruta Viva incidió en los precios de los predios aledaños a esta obra vial, que se inicia en San Juan de Cumbayá y termina en Puembo. Existen dos realidades: el aumento del metro cuadrado de terreno y el del metro cuadrado de construcción.
En la primera, el alza va desde el 70 hasta el 100%. Mientras en la segunda es del 30%, según especialistas en la construcción.
Esta realidad se dio más en terrenos ubicados a unos 500 metros de esta arteria.
Entre los que están, por ejemplo, La Primavera y San Juan, en Cumbayá, y en La Tola Grande y Chica, en Tumbaco. En menor medida hubo esta situación en sectores más alejados como Puembo y Pifo.
En un recorrido realizado por este Diario se constató esta situación. A los alrededores de la nueva vía hay terrenos disponibles que son pretendidos por los constructores, para sus proyectos. Mientras que las casas de los conjuntos habitacionales mejoraron su plusvalía.
En La Primavera, a pocos metros del intercambiador de Lumbisí, se construyó el conjunto Itzel. Fue edificado por la inmobiliaria Andino & Asociados. Hace dos años, cuando adquirieron los terrenos, el precio del metro cuadrado alcanzó los USD 100. Ahora, en la misma zona, está a USD 250.
Alberto Andino, encargado de la inmobiliaria, está interesado en adquirir otros terrenos para construir un nuevo conjunto, pero le sorprendió el precio que se pide para adquirirlos. “Los dueños de tierras han subido excesivamente los costos de los terrenos”.
Para él, es un proceso de especulación que se da en el mercado de manera natural, ya que las condiciones de estas tierras mejoraron. Es decir, dejaron de ser sitios sin accesos hacia el hipercentro y se convirtieron en lugares exclusivos por la ubicación y la facilidad para salir a Quito. Actualmente, el tiempo se redujo a 30 o 40 minutos. Antes: hasta dos horas.
Otro de los puntos de mayor plusvalía está a la altura del intercambiador de la Intervalles (conexión Los Chillos-Tumbaco). En los últimos años, en este sector se han asentado conjuntos residenciales como El Poblado. Robinson Galarza, constructor, dijo que los precios han aumentado en Tumbaco.
Para él, no hay razón ya que son terrenos que fueron adquiridos hace muchos años y no se les dio uso. “Sin producirlos se han duplicado sus precios”.
Sin embargo, explicó, se adquieren porque existe la oferta y la demanda.
Hace unos 20 años estos terrenos eran destinados a la agricultura.
Carlos Columba, dirigente del barrio Ocaña, relató que la venta de terrenos se la hacía entre personas de la comunidad para sembríos y ganadería. “No llegaban nuevos compradores, pues no había vías ni servicios básicos”, dijo.
Esa realidad cambió. “Llegan interesados en adquirir tierras para construir conjuntos y viviendas individuales”.
En varios terrenos se observan carteles que dicen: Se vende y pancartas que anuncian nuevos proyectos de vivienda.
En Puembo y Pifo, pese a que son zonas alejadas, se aprecia, también, una mayor plusvalía. El motivo: son zonas de influencia al Aeropuerto Mariscal Sucre, de Tababela. Por ejemplo, en la urbanización Los Arrayanes (Puembo), el metro cuadrado de terreno aumentó de USD 100 a 410.
El impacto que generó el aumento de precios de terrenos provocó que el precio del metro cuadrado de construcción, en la zona de Tumbaco, superara los USD 1 000. Y el tope alcanzó los USD 1 500. Por lo que se constituye en una zona para quienes tengan recursos.
Fabricio Yépez: ‘El precio se rige por el mercado’
Catedrático Universidad San Francisco de Quito, USFQ.
En un sistema económico donde rige la oferta y demanda libre, los precios se acomodan a dicha ley. La Ruta Viva permite que exista un incremento importante en la demanda de tierras y la oferta se mantiene estable o disminuye, por lo que sube el precio.
Esto ocurre en todas partes del mundo. El impacto de la subida de precios de terrenos ha provocado que el precio del metro cuadrado de construcción supere los USD 1 000. La elevación de los ingresos de la clase media le permite buscar una mejor calidad de vida y adquirir estos proyectos. Ahora, si se desea influir en este proceso libre, se requiere establecer un marco regulatorio y de control que provenga de las autoridades nacionales y locales.
La propuesta de la nueva Ley de Ordenamiento Territorial, Uso y Gestión del Suelo es un intento de regular el mercado del suelo. Pero, aún hay que analizarla y debatirla.