El proyecto para la construcción del Hotel Holiday Inn ya pasó el primer debate. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Al menos 13 proyectos de inversión urbanística -entre hoteles, viviendas y centros comerciales- están detenidos y esperan su aprobación en la Alcaldía de Quito.
El miércoles, la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Vivienda del Ecuador (Apive) envió una carta al Municipio. Pide que se dé trámite a la aprobación de los planes arquitectónicos que no se han concretado desde hace tres años.
Jaime Rumbea, representante de Apive, asegura que por el retraso en la aprobación, la ciudad deja de percibir ingresos cercanos a los USD 2 000 millones, además de fuentes de empleo y casas más baratas.
“El costo de una vivienda tres o cinco años atrás no es el mismo que el de hora”. Esa es la idea con la que Rumbea explica cómo afecta la demora en el otorgamiento de los permisos para arrancar la construcción.
Apive representa a 21 empresas con sedes en distintas ciudades. Solo en Quito tiene ocho. Sin embargo, los 13 proyectos de los que habla en su pedido no son solo de los asociados de Apive.
Rumbea dice que el atraso es responsabilidad del Concejo Metropolitano que, tres años atrás, planteó la necesidad de que haya una normativa específica para aprobar cada una de esas propuestas. “Lo que debía hacer es establecer el marco general y las condiciones para los cambios de tipo de uso de suelo, para que sea la Alcaldía la que otorgue los permisos. No debe negociar y aprobar, porque ya se demostró que eso es ineficiente”, comenta.
El tratamiento que se da al tipo de proyectos por los cuales reclaman los inmobiliarios es especial. Esto lo afirma Sergio Garnica, presidente de la Comisión de Uso de Suelo del Concejo. Se los denomina Proyectos Urbanísticos Arquitectónicos Especiales (Puaes) y para su construcción se requiere de una ordenanza propia que los viabilice. Para que llegue a esa instancia, el Concejo debe aprobarla.
“La Ordenanza que regula a los Puaes busca que un proyecto no duerma por años en el Municipio”, indica Garnica. Para esto, la Secretaría de Territorio, Hábitat y Vivienda del Municipio tiene un plazo de 60 días para emitir un informe.
La semana pasada se firmó una resolución para que se regule el protocolo de procedimiento de Puaes.
Jacobo Herdoíza, secretario de Territorio, Hábitat y Vivienda, explica que actualmente la Alcaldía está en la posibilidad de cumplir con ese plazo.
“Estamos mejorando muchísimo los tiempos de las unidades que forman parte de la mesa técnica y en la asertividad de las observaciones. Los promotores también saben que no deben excederse en pulir sus proyectos para que los trámites no caduquen”, señala.
Otra medida para agilitar los procesos fue la de ajustar los requerimientos que deben cumplir los promotores inmobiliarios para evitar que los proyectos caigan en la inviabilidad, según Garnica.
Todo este proceso, para los representantes del sector inmobiliario, es ineficiente y causa las demoras. Silverio Durán, presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción, menciona que esa es la queja constante de las inmobiliarias y constructoras.
“Los inversionistas no esperan la voluntad de los personeros municipales. Ellos necesitan ejecutar inmediatamente el proyecto para tener un retorno de lo invertido”.
Un año atrás, el Concejo aprobó la Ordenanza en la que se regula la denominada Concesión Onerosa, que no es otra cosa que el pago que hace el promotor inmobiliario al Cabildo por permitirle aumentar pisos o hacer cambios drásticos en una zona con un tipo de uso de suelo diferente.
Marco Ponce, concejal de la Comisión de Uso de Suelo, precisa que el problema para evacuar los proyectos desde esa comisión a primer debate en el Concejo, es que no había acuerdo para determinar la fórmula de cobro de esos valores al promotor.
Ponce dice que ahora eso ya está definido y los planes reciben un tratamiento más expedito. Según él, en el momento, no hay diseños represados en la Comisión de Uso de Suelo.
Pero el sector inmobiliario siente que, aunque hay proyectos que sortearon la Comisión de Suelo o el primer debate en el Concejo, no es suficiente. Rumbea señala que lo que se requiere es que se aprueben de manera inmediata para
Con los ajustes en la Secretaría de Territorio, Hábitat y Vivienda y la Comisión de Uso de Suelo, Ponce dice que se agilitó la aprobación. En la última sesión de esa comisión, del 17 de septiembre, se aprobaron cinco proyectos inmobiliarios: Ciudad Jardín, Betania, San Patricio, Holiday Inn y Vedere Tectum.