Con pancartas y gritos de oposición, los habitantes de la parroquia Calderón, en el norte de la capital, rechazaron el anuncio de la posible construcción del centro de retención provisional, en el barrio El Calvario, ubicado a 1 kilómetro del centro de Calderón.
Según los moradores, el proyecto es edificar la cárcel en el terreno de una quinta. Allí funciona el Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) de la Policía Nacional.Diez habitantes del sector repartieron hojas volantes para convocar a los moradores de la parroquia a la reunión que se realizó el pasado sábado. Participaron en la cita dirigentes y moradores de 195 comunidades.
En la puerta principal de ingreso a la iglesia, frente al parque, se instalaron equipos de amplificación y parlantes para informar los detalles del problema.
Germán Vega, uno de los organizadores de la protesta, explicó a alrededor 100 personas presentes en el parque que el acuerdo para la construcción del centro ya fue firmado en octubre del 2010, sin que la población sea informada que el proyecto servirá para reubicar a 330 presos.
Según los papeles de Vega, el acuerdo se hizo con las firmas del ministro de Justicia, José Serrano, y del director de la Comisión Nacional de Transporte Terrestre y Seguridad Vial, Ricardo Antón, para un comodato de 50 años en las instalaciones de la UIAT.
Mientras los vecinos intervenían, llegó a la reunión Isabel Bejarano, presidenta de la Junta Parroquial. Por momentos, la presencia de la dirigente alteró los ánimos de la población. Aunque ella aseguró que desconocía el documento firmado, Vega le reclamo por no informar y consultar a la comunidad sobre la suscripción del acuerdo.
“Usted sabía de todo. No informó a la comunidad. No se ha socializado el proyecto. La Administración Zonal del Municipio tampoco ha hecho nada por defender al pueblo; 380 000 habitantes sufriríamos las consecuencias”, reclamó Vega.
Bejarano desmintió esas versiones y se comprometió a pedir una audiencia con funcionarios del Ministerio de Justicia y del Municipio. Los habitantes exigieron que la reunión entre las autoridades y la población se realice en la parroquia.
Ayer, Bejarano ratificó a este Diario su rechazo a la propuesta de construir el centro y anunció que hoy mantendrá una reunión con los representantes de la Administración Zonal para exigir una audiencia en el Ministerio de Justicia y solicitar que no se concrete el acuerdo del comodato.
Los organizadores de la protesta dieron plazo hasta el miércoles para que Bejarano logre una audiencia con las autoridades.