Policía deja fuera de su indagación a coroneles que hablaron con disidente

A finales de marzo, dos policías vigilaban la vía San Lorenzo-Mataje, en Esmeraldas. Foto: Archivo / EL COMERCIO

A finales de marzo, dos policías vigilaban la vía San Lorenzo-Mataje, en Esmeraldas. Foto: Archivo / EL COMERCIO

A finales de marzo, dos policías vigilaban la vía San Lorenzo-Mataje, en Esmeraldas. Foto: Archivo / EL COMERCIO

Las comunicaciones que los policías intercambiaron con el responsable del Frente Óliver Sinisterra provocaron una investigación interna en la Policía.

La indagación que se abrió apunta al oficial que tiene rango de Mayor y no a los dos coroneles que también son mencionados en el sistema judicial.
“En los chats no se dice nada de ellos. Únicamente le confunden con un coronel”, sostiene un alto oficial.

Pero información judicial muestra que el disidente de las FARC chatea con un coronel y habla con otro y le exige que liberen a su gente capturada en territorio ecuatoriano.

Entre los presos están alias ‘Fernando’, alias ‘James’ y alias ‘Cuco’, considerado la mano derecha de alias ‘Guacho’.

Los tres habían sido capturados en Mataje el 12 de enero del 2018, es decir, 15 días antes de que estallara el coche bomba en la zona de San Lorenzo.

Informes judiciales revelan que su captura se produjo a las 02:00 en una casa ubicada en las calles 35MB50, SL tres y calle Z. Durante esa incursión, los agentes hallaron armas y granadas tipo piña en el dormitorio, debajo de la cama, en el comedor y en la cocina.

El jefe de la disidencia le dice al coronel que hagan un “convenio en serio” y que Ecuador tiene capturado “de gusto” a sus hombres.

Estos detalles constan en un proceso judicial abierto por la Fiscalía. La indagación iniciada en la Policía es diferente, aunque tras recopilar todas las evidencias, el material será entregado al fiscal del caso.

Por ahora, el Mayor de la Policía, señalado por el intercambio de mensajes, afronta una investigación interna, que fue abierta hace 15 días. La próxima semana deberá acudir a la Inspectoría para someterse al detector de mentiras.

Allí será sometido a un interrogatorio que implica preguntas como estas: ¿Tiene nexos con el narcotráfico?¿Ha participado en actos delictivos? ¿Ha entregado a las bandas información sobre operativos montados por los agentes?

La idea es definir oficialmente los nexos con alias ‘Guacho’, pues las pericias determinan que desde el número terminado en 887, el jefe de los disidentes se comunicó con “diferentes números”.

Solo en un caso, los investigadores se incautaron de 14 teléfonos que estaban en poder de ocho personas cercanas al cabecilla de los armados.

Los investigadores extrajeron la información contenida en esos aparatos. Para ello, el Fiscal pidió que el personal trabaje ajustado al Código Integral Penal.

En la casa de alias ‘Cuco’ también se encontraron “teléfonos celulares” y una tarjeta SIM.

Este material es analizado por las autoridades y durante las pericias se descubrieron las llamadas y mensajes que los policías intercambiaban con el disidente de las FARC.

En esas comunicaciones, el responsable de la disidencia  indica que tiene a un grupo de “muchachos” en el Ecuador, con la orden de iniciar “acciones militares”.

El coronel le dice que le llame la semana entrante para seguir conversando.
El oficial también se refiere a un “convenio” y pide que espere a que se concrete una cita.

En la Policía se advierte que todo este material es parte de los indicios que recopilan, que no se esconderá nada y que se transparentará todo lo que se encuentre en el proceso de investigaciones.

El 16 de mayo, en la Asamblea Nacional también fue interrogado sobre este tema el exministro del Interior, César Navas.

La respuesta que entregó se mantiene en reserva, pues así fue declarada la reunión del Pleno legislativo, que recibió a Navas y al exministro de Defensa, Patricio Zambrano.

Luego de la cita, el legislador Luis Fernando Torres sostuvo que al topar este tema se dio “un giro interesante” a la reunión. “Le plantearon varias preguntas (a Navas), especialmente sobre el rol que habría jugado un miembro de la Policía Nacional en las negociaciones con alias ‘Guacho’ e incluso habría mantenido varias conversaciones telefónicas, que fueron grabadas debido a la interceptación que habría estado en curso”.

Este caso también se ha tratado ya en el Parlamento. Por ejemplo, en la Comisión de Asuntos Internacionales, los legisladores receptaron una petición para que se investigue lo sucedido en la frontera norte y la actuación de los policías asignados a Esmeraldas y sus poblaciones.

En contexto

De acuerdo con las investigaciones judiciales, uno de los coroneles mantuvo conversaciones con el disidente de las FARC, entre enero y el 5 de abril de este año. El número con el cual se contactaba era de origen colombiano y terminaba en 887.

Suplementos digitales