Redacción Judicial
Mariana Yépez, ex fiscal general de la Nación, asegura que no le interesa para nada “cómo resuelvan ni los jueces titulares ni los conjueces (de la Primera Sala de lo Penal) el proceso penal”, que se sigue en contra de los hermanos Roberto y William Isaías, administradores de Filanbanco hasta 1998.
“Les pueden sentenciar (a los hermanos Isaías) a 20 años, a 30 años, no me interesa”, sostuvo. Yépez acudió ayer a la invitación de la Comisión del Régimen Económico y Tributario de la Asamblea Nacional, que convocó a los involucrados en el manejo del caso de Filanbanco, que se litiga en la Corte desde julio de 2000.
Cerca de las 14:00, el presidente de la Comisión, Paco Velasco, recibió a Yépez, quien llegó acompañada de Jaime Velasco, ex presidente de la Corte, quien ayer dijo acudir en calidad de ‘amigo’.
El viernes pasado, el presidente de la Corte Nacional de Justicia, José Vicente Troya, había nominado a Velasco y a otros dos juristas (Jaime Flor y Galo García) conjueces del caso Filanbanco. Los tres se excusaron.
Yépez, quien también estuvo acompañada de Francisco Vivanco, director de diario La Hora, se refirió, en una exposición de más de una hora, a los motivos por los cuales el 20 de noviembre de 2002 no acusó del delito de peculado a los hermanos Isaías. “No acuso de peculado, porque, a mi entender, no había disposición arbitraria de fondos públicos”.
Además, dijo, los préstamos, de liquidez y de estabilización, que el Banco Central del Ecuador otorgó a Filanbanco, entre septiembre y diciembre de 1998, por 2,7 billones de sucres, unos USD 450 millones, fueron a esa entidad bancaria y “no a los hermanos Isaías”.
Dijo que acusó a los ex administradores de Filanbanco del delito de falsificación de balances, porque “hubo irregularidades en el asentamiento de la contabilidad de los préstamos”. Eso no era una violación a la ley, pero sí una falta a la normativa interna del ex Banco Central. “No se asentaron bien esos préstamos, porque no se dice, exactamente, que se asienta el préstamo, todo eso fue una falsedad, por eso acusé del delito de falsificación de balances”.
La ex Fiscal General sostuvo que el ex presidente de la Corte Suprema, Armando Bermeo, “cometió una gravísima irregularidad”, al basar el llamado a juicio plenario, por peculado, a los hermanos Isaías.
Según ella, se basó “en una auditoría de la empresa Deloitte & Touche, que no constaba en el proceso”. Y sostuvo que el ex superintendente de Bancos, Juan Falconi, y la Comisión Anticorrupción no señalaron el peculado.