El 15 de diciembre, Pedro Páez envió una carta al presidente de la Junta Reguladora, donde explicó que la SCPM “bajo ningún concepto está imponiendo la utilización obligatoria de dinero electrónico. Foto: Pavel Calahorrano / EL COMERCIO
El superintendente de Control del Poder de Mercado (SCPM), Pedro Páez, aseguró el jueves 15 de diciembre del 2016 que la intención de la resolución sobre dinero electrónico, emitida hace unos días, es “ampliar los canales para el desarrollo de transacciones a través de la apertura de cuentas” de este medio de pago.
El funcionario indicó que el objetivo es facilitar las transacciones a los usuarios que opten por el sistema.
El pasado 13 de diciembre, la Comisión de Resolución de Primera Instancia (CRPI) de ese organismo de control emitió una decisión para obligar a 14 bancos privados a unirse a la plataforma de dinero electrónico en 30 días.
La entidad advirtió que sancionará a los bancos que no cumplan con esta disposición con hasta el 8% del volumen de su negocio. La decisión es una medida preventiva por supuestas prácticas desleales de las entidades bancarias, dijo el ente de control.
Sin embargo, 8 horas después de que se comunicó la resolución, la Junta Reguladora Monetaria y Financiera desautorizó la medida.
La Junta señaló, a través de un comunicado de prensa difundido por el Ministerio Coordinador de la Política Económica, que la resolución de primera instancia de la SCPM no puede obligar a entidades del sistema financiero nacional a implementar la creación de cuentas de dinero electrónico.
El organismo agregó que “la formulación de la política monetaria, crediticia, cambiaria y financiera es facultad exclusiva de la función ejecutiva (…) y se ejerce a través de la Junta de Regulación Financiera”.
El máximo organismo de regulación del sector financiero emitió una resolución en agosto del 2016 en la cual se dispuso que la participación de la banca en el sistema sea voluntaria. Por eso enfatizó que esa norma “no puede ser alterada por ningún otro órgano que no sea la propia Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera”.
Pero el jueves 15 de diciembre, el titular de la entidad de control, Pedro Páez, envió una carta al presidente de la Junta Reguladora, Patricio Rivera, donde explicó que la SCPM “bajo ningún concepto está imponiendo la utilización obligatoria de este medio de pago electrónico”.
Además negó que esté formulando alguna política de gestión del sistema financiero.
Páez también indicó que se coordinó en conjunto con el Banco Central, la Corporación de Finanzas Populares, la Empresa Pública Yachay y las Superintendencias de Bancos y de Economía Popular y Solidaria elaborar medidas para promocionar el uso del dinero electrónico.
De acuerdo con el documento de la Superintendencia, se resolvió que las entidades miembros de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (Asobanca) implementen la creación de cuentas de dinero electrónico en un término de 30 días y, además, les queda prohibido rechazar o negar las transacciones con dinero electrónico.
En tanto, la Asobanca se encuentra en un análisis de los procedimientos que seguirán al respecto. Julio José Prado, titular del gremio, dijo que se realizarán reuniones técnicas hasta el lunes 19 de diciembre para determinar las acciones legales que llevarán adelante al respecto. “Creemos que el camino que tiene que seguirse es por la vía legal y estamos esperando el desenlace de los comunicados entre el ministro Rivera y la Superintendencia”, dijo Prado.
El dinero electrónico es un medio de pago que utiliza el celular para realizar compras o transferencias en supermercados y autoservicios, previo al canje de dólares físicos.
El sistema se lanzó el 24 de diciembre del 2014. En ese entonces, el Banco Central del Ecuador (BCE), que administra el sistema, proyectó que unas 500 000 personas ingresarían al sistema. Pero la plataforma tuvo un lento despegue. Hasta mayo de este año, según el BCE, estaban registradas 66 000 cuentas de dinero electrónico.
Pero a partir de entonces el número de cuentas de dinero electrónico comenzó a crecer. Hasta la semana pasada reportó 278 844 cuentas de dinero electrónico abiertas.
Según datos del BCE, existe USD 4,2 millones en saldos en cuentas de dinero electrónico. Sin embargo, el monto representa el apenas el 0,08% de la masa monetaria del país.