El campamento habitacional está ubicado en El Aromo. Las 140 villas están abandonadas desde el 2017. Juan Carlos Pérez para EL COMERCIO
El acueducto La Esperanza, un campamento habitacional de 140 villas, vías, terrenos y una plataforma, constituyen las obras tempranas del proyecto Refinería del Pacífico (RDP), en Manabí; desde el 2017 ninguna de estas instalaciones está protegida con una póliza de seguros.
La situación fue reconocida ayer por Christian García, responsable del proceso de liquidación de la Refinería. En un recorrido por el campamento habitacional, él y otros funcionarios constataron el deterioro del complejo, ubicado en El Aromo, y que ha permanecido abandonado en los últimos dos años tal como lo reportó El Comercio el 14 de abril pasado.
García reveló que se percataron de esta falencia en marzo, cuando empezó ese proceso de liquidación, pese a que las leyes exigen asegurar los activos del Estado.
Las obras tempranas fueron construidas por un valor de USD 678 millones. La más costosa fue la plataforma con USD 304 millones, ahí se pensaba levantar la planta de refinación, pero solo quedó un terreno aplanado de 575 hectáreas.
El acueducto La Esperanza se construyó por un monto de USD 298 millones, es la obra más importante. Abastece de agua cruda a los cantones Manta, Jaramijó y Montecristi.
La ausencia de una póliza de seguros para las infraestructuras fue advertida a Petroecuador en julio del 2018, por parte de la gerencia de la Refinería.
Documentos a los que tuvo acceso este Diario dan cuenta de que la gerencia de RDP presentó en agosto de ese año a Petroecuador cuatro cotizaciones con diferentes empresas para asegurar los bienes.
Una de ellas era con la estatal Seguros Sucre, estaba valorada en USD 458 896. Cubría multiriesgo, incendios, robo y asalto, equipo electrónico, rotura de maquinaria y fidelidad.
Petroecuador negó los recursos. Argumentó que dentro de los USD 5 millones asignados para el funcionamiento de ese año hay USD 720 000 que fueron solicitados para la contratación de seguros. No obstante, la petrolera pidió que esos fondos “no sean utilizados hasta que se cuenten con opciones más económicas”.
Además, quedó pendiente una respuesta de la venezolana Pdvsa, el otro accionista de la Refinería, pero hasta el momento no ha dado pronunciamiento alguno.
Para corregir esa situación, García comunicó que está en marcha la contratación de una póliza integral para cubrir a todos los bienes.
Este momento se estudia la oferta de la compañía Latina Seguros, el monto referencial del seguro es de USD 600 000. Se espera que en el transcurso de la próxima semana se adjudique el contrato. El rubro mencionado por García es superior a la oferta de Seguros Sucre del año anterior.
Una vez que finalice el proceso de liquidación la administración de los activos pasará a diferentes instituciones. La Secretaría Nacional del Agua (Senagua) se hará cargo del acueducto La Esperanza.
La responsable directa de la administración, mantenimiento y operatividad de la obra será la Empresa Pública del Agua, dijo la Secretaría.