El ministro Richard Martínez (izq.) presentó la Pro forma del 2019 el pasado miércoles 31 de octubre del 2018. Foto: cortesía Ministerio de Economía y Finanzas
Las cinco nuevas líneas de crédito que aprobó el Comité de Deuda y Financiamiento ayer, 6 de noviembre del 2018, financiará proyectos específicos de inversión; también se incluyen recursos de libre disponibilidad.
En total, el Gobierno recibirá USD 1 185 millones en nuevos recursos.
De ese monto, USD 500 millones son de libre disponibilidad y ya fueron registrados ayer. La operación se logró con el banco de inversión Credit Suisse e incluye una garantía colateral de USD 1 250 millones en bonos que no pueden ser negociados en el mercado internacional y que no generan interés.
Al final del período acordado, Credit Suisse devolverá la totalidad de los bonos entregados. Según Finanzas, la operación incluye una tasa de interés más baja que la que paga el mercado internacional y permitirá un ahorro de USD 90 millones en el período del crédito, que es de cuatro años y cinco meses.
Además, el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) extendió dos créditos para financiar obras en Quito y en Guayaquil. El primero, por USD 230 millones se destinará al proyecto “Primera Línea del Metro de Quito”. Mientras el segundo, por USD 233,6 millones servirá a la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guayaquil.
El cuarto préstamo, de USD 152,2 millones, fue aprobado por parte del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), destinado a financiar parcialmente el proyecto ‘Primera Línea del Metro de Quito’. Por último, The Export Import Bank of China destinó USD 69,4 millones para financiar el Proyecto de Reconstrucción de la Infraestructura del Transporte Fase I, que se ejecutarán en las provincias de Manabí y Esmeraldas, incluido el Aeropuerto de Manta.
Según el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, estas cinco operaciones permiten cumplir con la programación de financiamiento conforme lo planificado, inyecta liquidez a la caja fiscal y aumenta el nivel de reservas, tan importante para mantener la dolarización.