Redacción Guayaquil
El polémico partido del último sábado entre el Deportivo Cuenca y El Nacional no solamente le significó al equipo militar la expulsión de tres de sus jugadores, sino que implicó además el inicio de un reclamo por supuestos insultos racistas.
El atacante Ronnal Campos dijo que recibió insultos del árbitro Omar Ponce, ante eso, el club protestó en la sede de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
La noche del último martes, la dirigencia de El Nacional presentó un reclamo ante la Comisión Nacional de Arbitraje, en defensa de su jugador. El gerente general del club, Néstor Landeta, aseguró que a pesar de que no hay evidencias, esto sentará un precedente.
“Lamentablemente es muy difícil probar las declaraciones del jugador, pero considero que este reclamo sirve para que los árbitros no incurran en este tipo de actitudes que hacen daño”.
Landeta dijo que Campos y Ponce deberán presentarse el próximo martes en la FEF, como parte de la investigación del caso. “Será la palabra del jugador contra le del árbitro”.
Campos ha mencionado que cuenta con el respaldo de dos testigos de los insultos, ambos jugadores del Deportivo Cuenca: Giancarlos Ramos y Javier Chila.
El DT de El Nacional, Juan Carlos Burbano, ha dicho que durante el partido Campos le comunicó que Ponce lo estaba insultando. Landeta señaló, además, que el atacante denunció que Ponce estuvo provocando a los jugadores durante el desarrollo del cotejo.
Por su actuación en el partido del sábado, Ponce recibió el martes una calificación regular y una fecha de suspensión. El árbitro se ha mantenido en silencio. Este Diario intentó contactarlo, pero no atendió su teléfono.
Alfredo Intriago, presidente de la Asociación de Árbitros, rechazó la acusación de El Nacional. Y pidió respeto para el silencio de Ponce, ya que en caso de hablar sobre el caso, la FEF podría aplicarle alguna sanción.
La mañana del martes, Intriago rechazó el reclamo de Campos y defendió a su gremio. “El jugador tiene que demostrar el insulto. Se quiere enlodar a un árbitro cuando no hay la capacidad de jugar limpio un partido. Los que hemos sido insultados siempre hemos sido nosotros”.
El líder del gremio arbitral insinuó además que las presiones o críticas para los jueces ocurren cuando ciertos equipos necesitan puntos para clasificarse. “Muchos quieren justificar lo que no pueden ganar en la cancha”.
Ponce, nacido en Milagro, dirige partidos de la Serie A desde inicios del año pasado, junto a otros siete árbitros (otro réferi central y seis asistentes). Incursionó en el referato hace 11 años.
Campos ratificó la denuncia
El delantero imbabureño Ronnal Campos denunció al árbitro Omar Ponce tras el cotejo ante Deportivo Cuenca, el sábado pasado. El delantero llamó a Stalin Cobeña, periodista de Nueva Emisora Central, en el acceso a los vestuarios del estadio Alejandro Serrano Aguilar.
“(Omar Ponce) Me dijo negro care… Lo demás no puedo repetir. No supe cómo reaccionar. En ningún momento me dirigí mal a él. Fue una bronca interna que tenía, pero nada más”, señaló el jugador al periodista el sábado 13.
El goleador ratificó la denuncia tras la práctica de El Nacional, el martes 14, en el Complejo de Tumbaco en las afueras de Quito.
El ariete confirmó que sí existieron insultos, pero se mostró más cauto. “Eso ya pasó y ahora está en manos de los directivos. Es algo que primera vez me ocurre”.
Sin embargo, ante la inquietud sobre cómo puede probar su denuncia, indicó que tiene testigos. “Estaban (Gonzalo) Chila y Giancarlos Ramos, del mismo Deportivo Cuenca. Ellos escucharon todo en la cancha”.